La Comisión Europea ha adoptado este jueves la decisión de prohibir el uso de bisfenol A en los envases de alimentos debido a su riesgo para la salud, por lo que, tras un periodo de eliminación progresiva de 18 meses, ya no se permitirá la presencia de esta sustancia química en recipientes como botellas de plástico o utensilios de cocina.