MADRID, 15 Sep. (EUROPA PRESS) - Una forma especializada de terapia podría ofrecer esperanza a algunos de los jóvenes más vulnerables que padecen trastorno de estrés postraumático, según un estudio de la Universidad de East Anglia (Reino Unido). En el trabajo, que se publica en 'World Psychiatry', los investigadores analizaron la efectividad de la terapia cognitivo-conductual centrada en el trauma (TCC) para tratar a niños que habían sufrido múltiples traumas, como abuso, violencia o accidentes graves. Si bien ya se sabe que este tipo de terapia ayuda con el trastorno de estrés postraumático (TEPT), el nuevo estudio se centró en niños que habían experimentado múltiples traumas, un grupo que a menudo se considera más difícil de tratar.