MADRID, 17 Oct. (EDIZIONES) - ¿Es cierto que al envejecer se duerme peor por naturaleza? ¿O es un mito que hemos normalizado? Los expertos aclaran que el sueño cambia con los años, pero no todo debe asumirse como "normal". El insomnio crónico, las apneas, o la somnolencia excesiva, por citar algunos ejemplos, no son parte natural del envejecimiento, y pueden afectar al corazón, a la memoria, e incluso aumentar el riesgo de caídas.