La Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (Semfyc) ha insistido en la importancia de que los mayores de 65 años se vacunen contra la gripe, ya que, incluso cuando los virus circulantes no coinciden exactamente aquellos que están presentes en la vacuna, la vacuna protege a los adultos sanos y, en pacientes con menor respuesta a la vacunación, como ancianos e inmunodeprimidos, reduce la gravedad de la enfermedad y la incidencia de complicaciones, ingresos hospitalarios y muertes.