MADRID, 3 May. (EDIZIONES) - Mezclar alcohol con antibióticos puede conllevar riesgos que varían desde efectos secundarios leves hasta reacciones graves, dependiendo tanto del tipo de antibiótico, como de la cantidad de alcohol consumida. Según explica en una entrevista con Europa Press salud Infosalus Ana Dora Bonilllo, vocal de Adjuntos, Sustitutos y Regentes del Colegio de Farmacéuticos de Almería y farmacéutica comunitaria, entre los efectos secundarios más habituales se encuentran: Náuseas y vómitos y dice que el alcohol puede intensificar la irritación estomacal causada por algunos antibióticos; además de dolor de cabeza, de mareos o desequilibrio, así como problemas cardíacos.