Una de las dolencias más frecuentes de las glándulas salivales es la patología obstructiva, que puede producirse por diferentes motivos aunque los más comunes son los cálculos y las estenosis, y su tratamiento habitual consiste en la extirpación quirúrgica de la glándula afectada, pero el especialista del Departamento de Otorrinolaringología de la Clínica Universidad de Navarra, el doctor Jorge De Abajo, apuesta por una cirugía mínimamente invasiva enfocada a la reparación de la causa de la obstrucción, que evita los efectos adversos de la extirpación.