La Comisión Europea se ha defendido este miércoles tras la condena del Tribunal General de la UE (TGUE) por impedir el acceso a información sobre determinadas cláusulas de los contratos de compra de las primeras vacunas contra el coronavirus al asegurar que logró un "difícil equilibrio" entre la transparencia que reclamaban eurodiputados y particulares y la confidencialidad exigida por las farmacéuticas.