MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) - Un consorcio multiinstitucional de investigadores dirigido por un equipo del Hospital Infantil de Filadelfia (CHOP), en Estados Unidos, y el Equipo Internacional de Investigación COVID-19 (COV-IRT) ha descubierto que los genes de las mitocondrias, los productores de energía de nuestras células, pueden verse afectados negativamente por el virus, lo que provoca disfunciones en múltiples órganos más allá de los pulmones.