MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -
La sarcoidosis es una enfermedad inmunológica compleja con una evolución clínica y un pronóstico muy variables. Si bien algunos pacientes experimentan remisión espontánea, otros requieren tratamiento inmunosupresor para mantener la función orgánica y mejorar su calidad de vida. Si bien las guías internacionales recomiendan el uso de prednisona como tratamiento estándar para la sarcoidosis pulmonar, estas recomendaciones no se han basado en ensayos clínicos aleatorizados.
ESTUDIO DEL CENTRO MÉDICO ERASMUS EN ROTTERDAM
La prednisona suele presentarse con efectos secundarios como aumento de peso, alteraciones del sueño y síntomas psicológicos, que pueden afectar negativamente la calidad de vida de los pacientes. Además, su uso a largo plazo se asocia con un alto riesgo de complicaciones crónicas.
Una investigación del Centro Médico Erasmus en Rotterdam, en Países Bajos, concluye que el metotrexato ofrece una alternativa comparable a la prednisona, que se recomienda como tratamiento de primera línea para la sarcoidosis pulmonar, pero que causa diversos efectos secundarios.
IMPLICACIONES PARA EL TRATAMIENTO PERSONALIZADO
En esta investigación, publicada en la Conferencia Internacional de la American Thoracic Society (ATS) 2025 en San Francisco (Estados Unidos), los investigadores descubrieron que el metotrexato fue igual de eficaz para controlar la enfermedad, con potencialmente menos efectos secundarios, que la prednisona. El ensayo aleatorizado y controlado, realizado en el marco de una colaboración entre 17 hospitales de los Países Bajos, proporciona los primeros datos de alta calidad que comparan ambas terapias en pacientes con sarcoidosis pulmonar.
"Los resultados de este ensayo muestran que el metotrexato puede ofrecerse como una alternativa a la prednisona para pacientes con sarcoidosis pulmonar", resume la primera autora Vivienne Kahlmann, neumóloga en formación en el Centro Médico Erasmus en Rotterdam.
RESULTADOS CLAVE DEL ENSAYO PREDMETH
En el ensayo PREDMETH, los investigadores compararon a 69 pacientes que recibieron prednisona para la sarcoidosis pulmonar con 68 que recibieron metotrexato. Descubrieron que el metotrexato no fue inferior a la prednisona después de 24 semanas de tratamiento, pero su eficacia se inició más lentamente.
Aunque el número total de efectos secundarios fue similar, el grupo de metotrexato presentó menos efectos secundarios persistentes a las 24 semanas. Los efectos secundarios en sí también fueron diferentes: el aumento de peso, el insomnio y el aumento del apetito fueron más comunes en el grupo de prednisona, mientras que las náuseas, la fatiga y las anomalías de la función hepática fueron comunes en el grupo de metotrexato.
"Los resultados coincidieron con nuestra hipótesis", informa la doctora Marlies Wijsenbeek, última autora del estudio y neumóloga del Centro Médico Erasmus. "Sin embargo, fue sorprendente observar que algunos síntomas ya habían mejorado tras cuatro semanas de tratamiento en el grupo de metotrexato. Asimismo, añade que los hallazgos ayudarán a médicos y pacientes a elaborar planes de tratamiento más personalizados, señalando que las decisiones sobre el tratamiento deben basarse en las preferencias y necesidades individuales de cada paciente.
"Algunos pacientes priorizan una mejoría rápida de los síntomas y tienen menos miedo a los efectos secundarios, mientras que otros pueden preferir esperar más tiempo para que el tratamiento haga efecto si esto significa que pueden evitar la toxicidad de los esteroides", señala Kahlmann.
FUTURAS INVESTIGACIONES Y HERRAMIENTAS CLÍNICAS
De cara al futuro, los investigadores planean desarrollar una herramienta de ayuda para la toma de decisiones que ayude a médicos y pacientes a elegir el tratamiento adecuado. También planean estudios de seguimiento, que incluyen el análisis de muestras de sangre de los participantes para identificar biomarcadores celulares que permitan predecir la respuesta al tratamiento.
