¿Por qué falla la inmunoterapia? Un proyecto pionero español busca la respuesta en el ADN de tus propias defensas

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Archivo - Inmunoterapia, cáncer - WILDPIXEL/ ISTOCK - Archivo
Infosalus
Publicado: viernes, 26 diciembre 2025 8:27

   MADRID, 26 Dic. (EDIZIONES) -

   El European Research Council (ERC, por sus siglas en inglés) ha otorgado una prestigiosa Consolidator Grant al investigador y jefe del Grupo de Inmunogenómica Computacional del Vall d'Hebron Institute of Oncology (VHIO) Francisco Martínez Jiménez, para impulsar tL-CHANCER, un proyecto pionero que estudiará cómo las alteraciones genéticas de los linfocitos T —las células del sistema inmunitario que atacan a los tumores— pueden determinar la respuesta a la inmunoterapia.

   Comprender este proceso, conocido como ‘hematopoyesis clonal de linfocitos T’, podría abrir la puerta a tratamientos más eficaces y personalizados en el campo de la inmunoterapia, a nuevos biomarcadores, así como a terapias personalizadas capaces de mejorar los resultados en miles de pacientes.

   “Vamos a estudiar las alteraciones genómicas de los linfocitos T, unas células inmunitarias encargadas de atacar a los tumores. Queremos saber cómo suceden esas alteraciones, y cuáles suceden, para aprender qué mecanismos emplean, y así mejorar las inmunoterapias que se emplean actualmente. Estas terapias activan de distintas formas a nuestro sistema inmunitario, y concretamente, a estas células inmunitarias, para atacar a los tumores”, afirma este investigador durante una entrevista con Europa Press Salud Infosalus.

   Recientemente, tal y como resalta, se ha descubierto que hay ciertas alteraciones genómicas en estos linfocitos T, pero no se sabe muy bien cómo éstas pueden impactar la actividad antitumoral que realizan. “Queremos entenderlo con tL-CHANCER , identificar estas alteraciones en pacientes reales, y ver si algunas pueden servir para mejorar los tratamientos de inmunoterapia actuales”, afianza Martínez.

UN PROYECTO REVOLUCIONARIO EN EL CAMPO DE LA INMUNOTERAPIA

   Precisamente, comentamos con este científico que los tratamientos de inmunoterapia no están siendo tan eficaces como nos gustaría actualmente y por eso es necesario avanzar en la investigación en este campo.

   “Un número importante de pacientes no responde a la inmunoterapia y se ve que hay determinados factores que influencian el que los pacientes no respondan”, reseña este experto. De hecho, pone de ejemplo que se sabe que las células encargadas de atacar al tumor, las células inmunitarias, o linfocitos T, puede llegar un punto en el que estén en un estado de extremo cansancio -o exhaustas- y no sean capaces de atacar al tumor de manera efectiva. “Todo esto se conoce ahora mismo gracias a los estudios hechos en los últimos diez años. Sin embargo estos estudios se enfocaban en el estado actual de los linfocitos T y no consideraban sus alteraciones genómicas”, advierte.

   Por eso, califica al proyecto tL-CHANCER de “revolucionario”, porque con él se va a intentar dilucidar cómo el genoma de los linfocitos T, que se ha comprobado que tienen alteraciones en su DNA, pueden influenciar en la respuesta a la inmunoterapia. “Es algo que no se ha estudiado. Se ha conocido hace poco que tienen esas alteraciones en su genética los linfocitos T, y esto pueden tener un importante papel a la hora de que un paciente responda o no frente a la inmunoterapia. Además, los hallazgos previsiblemente sirvan también para mejorar los tratamientos actuales”, asegura el jefe del Grupo de Inmunogenómica Computacional del VHIO.

LA CLAVE: LA HEMATOPOYESIS CLONAL DE LINFOCITOS T

   En concreto, con este proyecto, Martínez quiere estudiar la ‘hematopoyesis clonal de linfocitos T’ o ‘expansión clonal’ de estas células inmunitarias que luchan contra el cáncer. Se trata de un proceso por el que un grupo concreto de linfocitos T empieza a multiplicarse más que el resto, formando una especie de ‘familia’ o de clon dominante dentro del sistema inmunitario, gracias o no, a esas alteraciones genómicas que se han descubierto recientemente.

   Se trata de un proceso que tiene lugar de forma natural en las personas, no sólo en el cáncer, tal y como precisa, y que se conoce ahora mejor gracias a las nuevas tecnologías que permiten secuenciar pequeñas expansiones clonales o pequeñas poblaciones de linfocitos T, que no tienen por qué ser tumorigénicas (con capacidad de desarrollar cáncer).

   “Ahora sabemos que estas expansiones clonales suceden en nuestro organismo, y queremos saber si suceden más en los pacientes con cáncer, y si además tienen la capacidad de influenciar su capacidad antitumoral”, subraya.

   Martínez confiesa que viene del campo de la genómica del cáncer y que es por ello por lo que decidió enfocar esta investigación en entender cómo las alteraciones genómicas de las células del sistema inmunitario podrían o no afectar al comportamiento del cáncer. “Ahora se está viendo, gracias a trabajos de investigación, que estas alteraciones genómicas también suceden en nuestro organismo como un proceso natural. Haciendo este paralelismo queremos entender cómo estas alteraciones que también suceden en las células no tumorales, y que pueden tener una actividad en la acción tumoral, y cómo pueden favorecer la respuesta a un tratamiento o no”, insiste.

UNA INVESTIGACIÓN DE CINCO AÑOS

   Con todo ello, aspira a lograr con esta investigación ciertos biomarcadores basados en las alteraciones genómicas que puedan darse en algunos linfocitos T, y que podrían informar de si un paciente responde o no a un determinado tratamiento de inmunoterapia.

   También, señala que quiere aprender de estas mutaciones de expansión clonal porque hay determinadas inmunoterapias dirigidas, como las terapias CAR-T, que podrían potenciarse incluyendo estas alteraciones, utilizando técnicas novedosas de edición genómica.

   En última instancia, este experto del VHIO admite que recibir una Consolidator Grant del ERC representa “un reconocimiento a la calidad del proyecto y al grupo”, particularmente después de un proceso “extremadamente competitivo”, y en el que “sólo uno de cada diez proyectos presentados recibe financiación”.

   “Es una financiación que no tiene comparación con la que obtenemos para investigar a nivel nacional. Son dos millones de euros que podemos gastar en 5 años, y que nos dan una seguridad y unos recursos a los que no podríamos tener acceso de otra forma. Esto nos permite estar enfocados en realizar nuestra investigación y no en buscar financiación”, concluye el ganador de esta ERC Consolidator Grant.

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