MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de un 20 por ciento de los pacientes que consultan a su médico de familia al inicio de la primavera lo hace por cuadros de debilidad y astenia, según ha reconocido la doctora Débora Nuevo Ejeda, del Servicio de Medicina Interna del Hospital Nuestra Señora del Rosario.
La experta señala que cerca de un dos por ciento de la población sufrirá estos cuadros en algún momento de su vida, especialmente en la franja de edad comprendida entre los 20 y los 50 años, y principalmente entre las mujeres.
La astenia, a juicio de Débora Nuevo Ejeda, se define como una sensación pasajera de cansancio, tanto físico como intelectual, que se inicia normalmente en las primeras semanas de la primavera. La enfermedad, añade, se achaca a cambios en los biorritmos, alteraciones hormonales, oscilaciones en la presión atmosférica y en la humedad ambiental, etc.
"Las alteraciones hormonales durante el cambio de estación explicarían por qué es más frecuentes entre los 20 y los 50 años, y la razón de que las mujeres se vean más afectadas", ha apuntado.
El primer paso que se debe tomar, según la internista, es descartar que no hay otras causas fisiológicas o patológicas, como anemia, hipotiroidismo, problemas reales de sueño o depresión. Cuando se confirma que no exista patología subyacente, se debe investigar sobre el estilo de vida y adoptar unas medidas higiénico-dietéticas y conductuales.
En este sentido, aconseja respetar el sueño, practicar ejercicio físico moderado y al aire libre, evitar alcohol o tabaco, seguir una dieta sana y equilibrada, y recurrir a suplementos vitamínicos.