MADRID, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Trombosis y Hemostasia (SETH) manifiesta que las fichas de autorización de las vacunas contra SARS-CoV-2 no contraindican su uso en personas con alteraciones de la coagulación, y recuerda que el beneficio de la vacunación en prevención del desarrollo de Covid-19 "supera ampliamente" los posibles riesgos en relación con la administración intramuscular de esta vacuna.
El texto que figura en la ficha de autorización1 de la vacuna BNT162b2 (conocida como la vacuna de PfizerR-BioNTechR) para el Reino Unido, la primera que será empleada en España, indica que debe ser administrada en músculo deltoides en dos dosis separadas por 21 días, y no puede ser administrada por vía subcutánea. La única contraindicación para su uso es la hipersensibilidad al producto y, en cambio, acepta su empleo si los beneficios superan a los riesgos, en este caso de hematoma tras la punción.
Las mismas precauciones en los pacientes anticoagulados por la vía de administración intramuscular ya son conocidas desde hace tiempo para otras medicaciones y vacunas, como la de la gripe, que son administradas habitualmente con toda normalidad. Asimismo, señalan que los pacientes con terapia anticoagulante o aquellas con un trastorno hemorragico pueden recibir vacunas por vía intramuscular siguiendo las recomendaciones de precaución que ya se emplean con otras medicaciones y vacunas.
Por otro lado, en en los pacientes anticoagulados con fármacos antivitamina K (como 'Sintrom' o 'Warfarina') o con anticoagulantes de acción directa como dabigatrán ('Pradaxa'), rivaroxabán ('Xarelto'), apixabán ('Eliquis') o edoxabán ('Lixiana'), no debe suspenderse el tratamiento para administrar la vacuna. No obstante, en los pacientes que están recibiendo fármacos antivitamina K, es conveniente confirmar que se encuentran dentro de su rango de INR objetivo al administrarse la vacuna.
Mientras que, en los pacientes en tratamiento con anticoagulantes orales de acción directa se debe de evitar el momento de pico máximo del fármaco al programar la vacunación. En los pacientes con coagulopatías (por ejemplo: hemofilias) tampoco hay contraindicación para la administración de vacunas intramusculares, si ésta se realiza de forma cuidadosa bajo supervisión de sus centros de tratamiento.
Y, destaca que se recomienda la administración de la vacuna con aguja fina y presionar de forma continuada y fija sobre el punto de punción al menos 3 minutos.