MADRID, 7 May. (INFOSALUS) -
Aunque el interés por el maquillaje en las chicas comienza como un juego en la infancia es al inicio de la adolescencia cuando puede convertirse en una práctica habitual que gane protagonismo con el paso de los años. No existe un mejor momento para comenzar a utilizar maquillaje pero sí unos conocimientos básicos para que la piel más joven y sensible permanezca sana.
NO EXISTE UNA MEJOR EDAD PARA USAR EL MAQUILLAJE
Según explica la doctora Eva Kubiczek-Love, pediatra de la Clínica Infantil de Cleveland en Estados Unidos, "hay que mantener una discusión abierta sobre el maquillaje tan pronto como la niña exprese interés, como de costumbre, los padres necesitan establecer expectativas y fijar límites".
La forma adecuada de utilizar el maquillaje depende de la perspectiva de cada familia y de que esta práctica sea la aceptada en la comunidad de la niña. La pediatra aclara que si la adolescente participa en actividades de baile o teatro el maquillaje podría ser más común en sus círculos sociales.
Sin embargo, la doctora apunta en la web de la institución médica americana cinco consejos que se aplican a cualquier tipo de maquillaje y que los padres deben tener en cuenta para ayudar a sus hijas a que la experiencia de maquillarse no pase factura a la salud de su piel:
5 CONSEJOS PARA CUALQUIER TIPO DE MAQUILLAJE
1. Comprar productos seguros: las etiquetas 'natural' y 'orgánico' no garantizan que el producto sea el más adecuado, hay que comprar productos con el menor número de ingredientes posible y evitar aquellos ingredientes que consideres que pueden ser perjudiciales. Leer las etiquetas es una costumbre básica para saber qué estamos comprando.
2. Comenzar con poco: no hay que tener prisas por añadir nuevas posibilidades. Para un preadolescente, se puede empezar por un brillo de labios. Puede añadirse con el tiempo una base de maquillaje u otros productos. Hay que evitar entrar de lleno en el uso de productos como lápiz de labios intensos y delineadores de ojos.
3. Atentos a la irritación de la piel: las reacciones ante los cosméticos pueden ser tan leves como el enrojecimiento de la piel o tan graves como urticaria e inflamación. La mayoría de síntomas aparecen con rapidez, señala la doctora Kubiczek-Love. En este caso, hay que eliminar el producto y no usarlo de nuevo.
En caso de urticaria o inflamación, hay que acudir lo antes posible al médico ya que las reacciones alérgicas en la cara del niño pueden extenderse a sus vías respiratorias. Además, las reacciones graves que requieren de una atención médica inmediata pueden ocasionar dificultad respiratoria, dolor abdominal o vómitos.
4. Ir despacio en caso de piel sensible o propensa al acné: evita los productos densos en aceite, en especial cremas, lociones y bases de maquillaje que pueden agravar el acné, eczema y afectar a la piel sensible. Utiliza un corrector libre de aceites en caso de acné.
5. Mantener una rutina adecuada de limpieza de la piel: el cuidado de la piel es importante para cualquier adolescente, en especial aquellos que utilizan maquillaje. Hay que enseñar a las chicas a:
- Lavarse la cara cada día con un limpiador suave.
- Evitar el jabón antibacteriano y los agentes exfoliantes. Los productos agresivos pueden dañar la piel joven y ocasionar brotes de acné.
- Eliminar todo el maquillaje antes de ir a la cama.
- Reemplazar los cosméticos cada 6 a 12 meses para minimizar el riesgo de contaminación.
- Evitar compartir cosméticos, lo que puede aumentar el riesgo de contaminación e infección.
"Es importante enseñar a los menores que el maquillaje es para mejorar su aspecto pero no para cambiarlo o abrumar con él", concluye la doctora Kubiczek-Love.