MADRID 10 May. (EUROPA PRESS) -
A nivel mundial, las infecciones por COVID-19 entre las personas vacunadas están aumentando, lo que hace temer por la durabilidad de la protección contra las variantes emergentes y altamente contagiosas que preocupan. Un nuevo estudio publicado en la revista de acceso abierto 'PLOS Biology', realizado por Galit Alter, de la Universidad de Harvard (Estados Unidos) y sus colegas, sugiere que, si bien las respuestas de anticuerpos neutralizantes inducidas por la vacuna protegen contra la infección, el control de la replicación viral está mediado por respuestas que implican a las células T y al receptor Fc de unión de anticuerpos.
Mientras que las respuestas de anticuerpos neutralizantes inducidas por la vacuna (es decir, los anticuerpos que se unen directamente al virus y "neutralizan" la infección) proporcionan la principal protección contra la infección y la enfermedad grave, otras respuestas inmunitarias menos conocidas contribuyen a la protección.
Para comprender mejor el papel protector de cada mecanismo inmunitario, los investigadores inmunizaron a cinco grupos de cinco macacos rhesus con diferentes dosis de la vacuna COVID-19 o con un control simulado. A continuación, desafiaron a todos los macacos con una infección de SARS-CoV-2 y analizaron la replicación viral en las vías respiratorias superiores e inferiores 1, 2, 4, 7 y 10 días después del desafío viral.
Los investigadores descubrieron que los mecanismos de inmunidad responsables de controlar la replicación viral tras la infección dependían de la dosis, lo que indicaba un papel importante en la protección contra la enfermedad grave y la muerte. Estas respuestas inmunitarias adicionales que controlan la replicación viral están mediadas por el llamado receptor Fc (una molécula de la superficie celular que reconoce la parte invariable de los anticuerpos y puede desencadenar la destrucción de las células infectadas) y por las respuestas de las células T, que complementan las otras respuestas de los anticuerpos que neutralizan directamente el virus.
Según los autores, "la continua aparición de varias variantes del SARS-CoV-2 con mayor infectividad y capacidad de evasión inmunológica ha complicado aún más el esfuerzo de vacunación mundial. Estos datos proporcionan una visión crítica en el contexto de la pandemia actual, en la que las variantes emergentes que preocupan tienen la capacidad de romper la protección mediada por la vacuna, pero la inmunidad inducida por la vacuna todavía provoca una respuesta contra varias variantes y proporciona cierto nivel de protección contra la enfermedad grave y la muerte".
Daniel Zhu, coautor del estudio, añade tras este "exhaustivo perfil de los efectos de los anticuerpos neutralizantes, la inmunidad de las células T y los mecanismos de acción de los anticuerpos alternativos no neutralizantes, encontramos correlaciones de la inmunidad en el contexto tanto de la protección completa como de la mitigación de la carga viral en la infección de ruptura. También observamos diferencias en la solidez de las características clave de la respuesta inmunitaria en las distintas dosis de la vacuna, lo que podría ayudar a orientar el diseño y el refuerzo de la vacuna en el futuro", concluye.