MADRID, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El doctor Max Ortiz Catalán de la Universidad Tecnológica de Chalmers, en Gotemburgo, Suecia, ha desarrollado un método para tratar el dolor de miembros fantasmas utilizando el aprendizaje automático y la realidad aumentada. El enfoque se ha probado en más de una docena de amputados con dolor crónico del miembro fantasma que no encontraron alivio por otros métodos clínicamente disponibles antes y redujo su dolor en aproximadamente el 50 por ciento, según un estudio clínico publicado en 'The Lancet'.
Las personas que pierden un brazo o una pierna experimentan a menudo dolor del miembro fantasma, como si la extremidad de la que carecen todavía estuviera allí. El dolor de miembro fantasma puede convertirse en un serio trastorno crónico que reduce notablemente la calidad de vida de los pacientes, pero todavía no se sabe por qué sucede el dolor de miembro fantasma y otras sensaciones.
Se han propuesto varios tratamientos médicos y no médicos para aliviar el dolor del miembro fantasma, como la terapia del espejo, varios tipos de medicaciones, la acupuntura y estimulación de los nervios con dispositivos implantables, pero sin resultar de ayuda en muchos casos. Ésta era la situación de los 14 amputados de brazos que participaron en el primer ensayo clínico de este nuevo tratamiento, desarrollado por el equipo multidisciplinario del doctor Ortiz Catalán en los últimos años.
"Seleccionamos los casos más difíciles de varias clínicas --relata Ortiz Catalán--. Queríamos centrarnos en pacientes con dolor crónico de miembros fantasmas que no habían respondido a ningún tratamiento. Cuatro de los pacientes estaban constantemente medicados y los demás no recibían ningún tratamiento porque nada de lo que habían intentado les había ayudado. Habían experimentado dolor de miembro fantasma durante un promedio de diez años".
Los pacientes fueron tratados con el nuevo método durante 12 sesiones. En la última sesión, la intensidad, la frecuencia y la calidad del dolor habían disminuido en aproximadamente el 50 por ciento. El impacto del dolor en el sueño y las actividades de la vida diaria también se redujeron a la mitad. Además, dos de los cuatro pacientes que tomaban analgésicos fueron capaces de reducir sus dosis en un 81 y 33 por ciento.
"Los resultados son muy alentadores, especialmente teniendo en cuenta que estos pacientes habían probado hasta cuatro métodos de tratamiento diferentes en el pasado sin resultados satisfactorios --resalta Ortiz Catalán--. En nuestro estudio, también vimos que el dolor continuamente disminuyó hasta el último tratamiento. El hecho de que la reducción del dolor no se estancara sugiere que podría lograrse mejoría con más sesiones".
USAR LAS SEÑALES MUSCULARES PARA CONTROLAR ENTORNOS VIRTUALES
Este método consiste en utilizar señales musculares de la extremidad amputada para controlar entornos virtuales y aumentados. Las señales eléctricas en los músculos son recogidas por electrodos en la piel y algoritmos de inteligencia artificial traducen las señales en movimientos de un brazo virtual en tiempo real. Los pacientes se ven en una pantalla con el brazo virtual en el lugar del brazo amputado y pueden controlarlo como controlarían su brazo biológico.
Por lo tanto, el brazo fantasma percibido es llevado a la vida por una representación virtual que el paciente puede ver y controlar, lo que permite reactivar las áreas del cerebro que se utilizaron para mover el brazo antes de que fuera amputado, que puede ser la razón de que el dolor del miembro fantasma disminuyera.
Ningún otro tratamiento existente para el dolor de miembro fantasma genera esa reactivación de estas áreas del cerebro con seguridad, según los autores, quienes resaltan que su investigación no sólo crea nuevas oportunidades para el tratamiento clínico, sino que también contribuye a entender lo que ocurre en el cerebro cuando se produce el dolor fantasma.
El ensayo clínico se realizó en colaboración con el Hospital Universitario Sahlgrenska de Gotemburgo, el Hospital Universitario de Örebro en Örebro, el Bräcke Diakoni Rehabcenter Sfären en Estocolmo, todos ellos en Suecia, y el Instituto Universitario de Rehabilitación en Ljubljana, Eslovenia.
"Nuestro proyecto conjunto fue increíblemente gratificante y ahora tenemos la intención de ir más lejos con un ensayo clínico controlado más amplio --adelanta Ortiz Catalán--. El grupo de control será tratado con uno de los métodos de tratamiento actuales para el dolor del miembro fantasma y esta vez también incluiremos amputados de pierna, con la participación de más de 30 pacientes de diferentes países, y ofreceremos más sesiones de tratamiento para ver si se puede hacer que el dolor desaparezca por completo".