MADRID 5 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las personas que forman parte de una minoría pueden ser vistas como moralmente superiores por parte de la sociedad, debido al sufrimiento que experimentan y que, al parecer, les hace más fuertes, según ha revelado una investigación realizada por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).
"Al pensar que se hacen más fuertes desde el punto de vista moral y psicológico, automáticamente creemos que van a ser más tolerantes", ha explicado el investigador del departamento de Psicología Social y de las Organizaciones de la UNED y autor principal del trabajo, Saulo Fernández.
De esta forma, el estudio, publicado en 'Personality and Social Psychology Bulletin', demuestra cómo los grupos mayoritarios creen que los minoritarios deben ser mejores personas que ellos, convencidos de que su sufrimiento les hace crecer moralmente.
Para comprobar si esta hipótesis era cierta, los psicólogos realizaron cuatro experimentos en los que combinaron variables independientes con dos valores para cada una de ellas. De esta forma, se realizaron preguntas a miembros del grupo mayoritario sobre cómo pensaban que sería la actitud, tanto de minorías estigmatizadas como de grupos no estigmatizados. Además, en los experimentos analizaron cómo eran las reacciones cuando se decía que el grupo estigmatizado era intolerante o tolerante.
En una de las pruebas, los miembros del grupo mayoritario afirmaron que se rompían sus expectativas si un grupo de personas con acondroplasia presentaba una actitud negativa hacia el colectivo inmigrante, expectativas que no se rompían si esta misma actitud racista la mostraban personas sin estigmas. Las mismas emociones negativas se despertaban cuando el colectivo gay era el que se mostraba intolerante con la inmigración.
"Es paradójico pero esta expectativa de una mayor calidad moral es una carga en los hombros de estos grupos porque, cuando luego son como cualquiera de nosotros (con sus prejuicios), al romper esta expectativa, se les pasa una mayor factura que a los demás", ha subrayado el psicólogo.
No obstante, y aunque el estudio no analiza si realmente las personas de estos grupos son o no moralmente superiores al resto, la opinión general de los expertos es que depende de cómo se perciban las minorías entre sí. Si se ven como competidoras por los mismos recursos públicos, las actitudes serán más negativas que si todos se sienten miembros de un grupo común que goza de los mismos derechos y oportunidades.
El trabajo, en el que participan también científicos de la Universidad de Kansas (Estados Unidos) y del Centro Interdisciplinar Herzliya (Israel), ha sido parcialmente financiado por la Fundación ALPE-Acondroplasia.