MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
La vacunación es un "pilar básico" de un estilo de vida orientado al envejecimiento saludable, junto al ejercicio físico, la alimentación adecuada o el desarrollo de una red de apoyos socioafectivos, según han resaltado expertos del ámbito sanitario en la mesa redonda 'Vacunas para envejecer con salud', organizada por el Observatorio de Salud, con el apoyo de GSK.
"La vacunación en todas las etapas de la vida es esencial para una vida sana y para un envejecimiento saludable ya que no solo previene frente a la enfermedad y la muerte, sino que también, protege contra las complicaciones, secuelas y discapacidad frecuentemente asociadas a las enfermedades inmunoprevenibles", ha reflexionado durante el encuentro la responsable del Grupo de Vacunas de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), Isabel Jimeno.
Alfredo Corell, catedrático de Inmunología de la Universidad de Valladolid y miembro de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), ha añadido que el cumplimiento de las recomendaciones de vacunación es tan importante en la edad adulta como en la edad pediátrica ya que "el sistema inmunitario de los humanos es heredado y hay dos momentos del desarrollo caracterizados por un nivel de funcionamiento más bajo: nada más nacer y cuando vamos envejeciendo".
Concretamente, según Corell, "los hombres por encima de los 50 años y las mujeres por encima de los 60 años experimentan un declive en el funcionamiento de sus defensas que hace que respondan peor ante las infecciones y les vuelve especialmente susceptibles a determinadas enfermedades".
Por este motivo, "cobra una importancia trascendental vacunarnos para ayudar a prevenir enfermedades como la gripe, el herpes zoster o la COVID-19, que pueden implicar riesgos para la vida y la calidad de vida".
Así, "al igual que en estas edades se trabaja en promover una mejor alimentación, hacer ejercicio, dormir bien o no consumir sustancias tóxicas, también es importante trabajar para que los mayores estén al día en la vacunación".
Según Guadalupe Fontán Vinagre, coordinadora del Instituto Español de Investigación Enfermera del Consejo General de Enfermería, las bajas tasas de vacunación en personas de mayor edad tendrían su origen en que "actualmente la población desconoce y, por tanto, tiene una baja percepción del riesgo que suponen las enfermedades prevenibles en los mayores de 65 años".
Para afrontar esta barrera, Fontán y el Consejo General de Enfermería han abogado por "impulsar la formación de ciudadanos y sanitarios de forma que puedan abordarse las dudas, favorecer el conocimiento, desmontar los bulos y promover la confianza de todos".
Por su parte, Ángel Gil, catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Rey Juan Carlos, ha destacado que tradicionalmente "el foco de las actividades de prevención en la edad adulta se ha centrado en la cronicidad, principalmente en el riesgo cardiovascular o el ictus, dejando de lado la prevención primaria".
Por ello, es fundamental, según el experto, impulsar el uso efectivo de las herramientas que permiten disminuir la aparición de enfermedades que afectan directamente a la calidad de vida, como la gripe, el neumococo el herpes zoster y que ya se encuentran incluidas en los calendarios de vacunación a lo largo de la vida aprobados por las autoridades de Salud Pública.
Especialmente importante, además, es asegurar que esa inmunización llegue de manera efectiva a la población adulta con factores de riesgo, según la doctora Carmen Román Ortiz, facultativo especialista en Medicina Preventiva Hospital La Mancha Centro y coordinadora de la Red de Vacunas de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública y Gestión Sanitaria.
La experta ha abogado por la "formación continuada de todos los profesionales que atienden a estos colectivos vulnerables con el objetivo de potenciar la vacunación al tratarse de una medida segura, eficaz y necesaria para evitar que sufran infecciones, mejorar su calidad de vida y facilitar la continuidad de sus tratamientos".
LAS ADMINISTRACIONES TRABAJAN PARA AMPLIAR LAS COBERTURAS VACUNALES DE ADULTOS
Además de la reciente aprobación del nuevo calendario de vacunación para toda la vida por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), que incluye como novedad la vacuna frente al herpes zóster para los mayores de 65 años, las comunidades autónomas trabajan ya en el desarrollo de estrategias que mejoren la disponibilidad de vacunas y amplíen las coberturas en adultos.
La directora General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Elena Andradas, ha apuntado que "la vacunación en el adulto es una de las mejores inversiones en salud" que está realizando la Comunidad: "Estamos trabajamos juntamente con los profesionales en programas que ayuden a informar de los beneficios que la vacunación para conseguir una mayor autonomía y promover un estilo de vida saludable".
Además, Madrid estaría realizando "una inversión económica importante de cara a ofrecer a sus ciudadanos programas de vacunación innovadores, tanto frente al herpes zoster como al neumococo, y llegar con ellos al mayor número de ciudadanos posible".
Castilla y León cuenta también con un innovador programa de inmunización regional que acaba de incorporar la vacunación frente al herpes zóster y la antineumocócica mejorada en las cohortes de adultos. Además, y junto con otras CCAA del norte España presenta unas coberturas muy altas, sobre todo a nivel infantil.
Un mérito que, en palabras de la directora General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Sonia Tamames Gómez, "corresponde atribuir a la población que valora de forma muy positiva los programas de prevención".
No obstante, y como oportunidad de mejora, Tamames considera necesario "insistir en la educación para la salud a todos los niveles de forma que se incremente la utilidad social percibida de las vacunas como herramienta para anticiparse a la enfermedad". Poner en marcha campañas de concienciación y de captación activa de las personas mayores son algunos de los retos marcados en Castilla La Mancha en el marco de su nuevo calendario de vacunación.
Su director general de Salud Pública, Juan Camacho Parejo, ha mostrado durante el encuentro el compromiso de su región con la inmunización y el esfuerzo económico y dotacional que vienen realizando en este sentido en los últimos años.
Y es que, según sus palabras "el objetivo es aprovechar la tendencia generada tras la pandemia de la COVID-19 y el conocimiento de los profesionales y los ciudadanos sobre el valor de las vacunas para seguir avanzando en la dirección correcta".
Entre sus objetivos de mejora más inmediato, el director ha mencionado la próxima incorporación de la vacuna frente al herpes zoster, tras el consenso alcanzado en el seno del Consejo Interterritorial.
El protagonismo creciente de la población adulta en las políticas de Salud pública es un hecho constatable en Canarias, según el director General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad de esta Comunidad, José Juan Alemán.
En concreto, Canarias ha puesto en marcha lo que denomina estrategia para el envejecimiento activo, en la que, como ha explicado, "las vacunas cobran un especial protagonismo". Así, ya están destinando recursos específicos con el objetivo de implantar herramientas concretas que consigan equiparar las coberturas conseguidas en la etapa infantil a la etapa adulta, apostando por mayor información, formación específica a profesionales y programas de sensibilización destinados a población general.