Archivo - 10 March 2021, Saxony-Anhalt, Ermsleben: Emergency paramedic Mandy Fleck draws up a syringe of Biontech/Pfizer coronavirus vaccine. Photo: Matthias Bein/dpa-Zentralbild/dpa - Matthias Bein/dpa-Zentralbild/dp - Archivo
MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
¿Sabías que la forma en que entendemos la ciencia puede cambiar nuestra confianza en las vacunas? Investigadores de la Universidad de Pensilvania han probado un enfoque innovador que enseña a las personas cómo funcionan las vacunas de ARNm antes de que surjan temores o dudas infundadas. Con este método, se puede prevenir la desinformación antes de que se viralice.
Investigadores del Centro de Políticas Públicas Annenberg (APPC) de la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos) han probado la eficacia de un enfoque de "modelo mental" para presentar información científica, que podría ser útil para combatir los temores infundados sobre las vacunas de ARNm. El trabajo está disponible en las 'Actas de la Academia Nacional de Ciencias (PNAS)'.
QUÉ ES UN MODELO MENTAL Y POR QUÉ IMPORTA
Cabe tener en cuenta que corregir información errónea después de que se viraliza es una forma común de informar al público que lo que han encontrado puede ser inexacto, carecer de contexto, no estar comprobado o ser demostrablemente falso. Sin embargo, repetir una idea errónea al refutarla conlleva el riesgo de difundirla a un público más amplio, especialmente porque quienes leen un informe de verificación de datos pueden no ser los mismos que se vieron expuestos originalmente a la información preocupante.
Para superar estos desafíos, este nuevo enfoque implica exponer a las personas a modelos visuales, verbales o animados para enseñarles conceptos científicos o médicos, de modo que cuenten con las herramientas necesarias para identificar conceptos erróneos antes de encontrarlos o, una vez aprendidos, puedan usar el modelo para superar los conceptos erróneos existentes.
Los investigadores descubrieron que el uso de un modelo mental para informar a las personas sobre facetas relevantes de la ciencia reduce el efecto de la exposición a conceptos erróneos, independientemente de si los modelos se presentaron antes o después de la información errónea.
Así, en este nuevo estudio investigadores dirigidos por Kathleen Hall Jamieson, directora de la APPC, probaron dos intervenciones basadas en modelos mentales para contrarrestar los temores infundados sobre la tecnología del ARN mensajero (ARNm), la innovación vital que revolucionó la creación de la vacuna contra la COVID-19.
Esta tecnología se utiliza para desarrollar vacunas contra riesgos para la salud potencialmente mortales, como el melanoma, el cáncer de páncreas, el virus de la gripe, el virus respiratorio sincitial, la gripe aviar, el VIH, el virus del dengue y la enfermedad de Lyme.
La tecnología del ARN mensajero ha sido atacada por críticos que alegan que las vacunas creadas con ella podrían alterar el ADN del receptor. Estos críticos afirman que el ADN residual del proceso de fabricación de la vacuna podría integrarse en el propio ADN del receptor y, por lo tanto, aumentar el riesgo de cáncer y efectos hereditarios.
Estos temores han sido planteados por el Cirujano General del Estado de Florida (Estados Undios), Joseph Ladapo, entre otros, quien ha desaconsejado el uso de vacunas de ARNm contra la COVID-19 en su estado. Estos temores infundados llevaron a los legisladores de Tennessee a ampliar la definición de "medicamento" de la Ley de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos del estado para incluir "alimentos que contienen una vacuna o material vacunal". También influyeron en un proyecto de ley de Minnesota que designaría "las inyecciones y productos de ARNm como armas de destrucción masiva" y prohibiría "las inyecciones y productos de ARNm".
No obstante, expertos como Peter Marks, exdirector del Centro de Evaluación e Investigación Biológica de la FDA de Estados Unidos, afirman que es improbable que fragmentos residuales de ADN lleguen a los núcleos celulares y se incorporen al ADN cromosómico. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) afirman: "Las vacunas contra la COVID-19 no afectan ni interactúan con nuestro ADN. Estas vacunas no entran en el núcleo de la célula, donde se encuentra nuestro ADN (material genético), por lo que no pueden modificar ni influir en nuestros genes".
En este contexto, Jamieson informa en una entrevista con 'PNAS' que las personas "crean modelos mentales para comprender cómo funciona el mundo y están dispuestas a confiar en ellos en lugar de en las reglas lógicas formales para decidir qué es cierto". En lugar de citar a las autoridades que afirman que los temores sobre la integración del ADN son infundados, este enfoque de modelo mental educa a las personas sobre cómo funcionan las vacunas de ARNm y cómo las células protegen su ADN de fragmentos extraños.
EL FUTURO DEL APRENDIZAJE Y LA PREVENCIÓN DE DESINFORMACIÓN
En experimentos preinscritos, los investigadores de APPC probaron dos modelos mentales. El primero utiliza una variante del enfoque de "derivación". Sin mencionar la afirmación problemática, este modelo ofreció a los encuestados un gráfico que mostraba cómo funcionan las vacunas de ARNm y evidencia sobre la seguridad de las vacunas de ARNm, anclada en una "estructura de conocimiento coherente y detallada".
El segundo modelo funciona "excluyendo": detalla las formas en que las células humanas "protegen contra o destruyen el ADN extraño", neutralizando así la supuesta amenaza del ADN extraño. Para excluir la afirmación de la integración del ADN, los investigadores utilizaron una animación de 105 segundos que representa cómo las células se protegen a sí mismas contra el ADN extraño.
El estudio implicó mostrar a grupos de encuestados en los dos experimentos (n=1.540 y n=2.038) distintas combinaciones de afirmaciones engañosas y los dos modelos científicos expresados como gráficos, texto o animación.
"Descubrimos que los encuestados que vieron las afirmaciones problemáticas junto con los modelos mentales eran más propensos a responder preguntas con base empírica que quienes solo vieron las afirmaciones problemáticas", informa Jamieson. "Estos experimentos sugieren un enfoque prometedor para superar algunos de los desafíos que enfrentan los usos habituales de la inoculación y la verificación de datos".
Dado que la exposición preventiva a los modelos podría ocurrir en cursos de escuela secundaria, preparatoria y universidad, investigaciones futuras podrían probar si este enfoque en un entorno de aula aumenta la aceptación de los estudiantes de la información descriptiva sobre cómo funcionan las vacunas de ARNm y cómo las células se protegen del ADN extraño.