Descubren la molécula esencial para el inicio de la pubertad

Mólecula formadora de vasos sanguíneos esencial en el inicio de la pubertad
Foto: PROFESSOR CHRISTIANA RUHRBERG (UCL INSTITUTE OF OP
Actualizado: miércoles, 20 mayo 2015 18:25

MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -

   Una molécula importante en la formación de vasos sanguíneos y el cableado del cerebro es también esencial para el inicio de la pubertad, según ha descubierto una nueva investigación liderada por la 'University College de Londres' (UCL), en Reino Unido, y la Universidad de Milán, en Italia.

   Los investigadores encontraron que un fallo genético impedía a esta molécula, llamada SEMA3E, funcionar correctamente en dos hermanos con síndrome de Kallman, una enfermedad hereditaria que impide a las personas entrar en la pubertad o ser capaces de oler. Entonces, analizaron ratones sin SEMA3E para ver cómo su pérdida afecta al desarrollo.

   SEMA3E protege las células nerviosas que regulan la reproducción sexual. Estas células nerviosas crecen en la nariz de los fetos en desarrollo y luego migran al cerebro donde producen la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH), que es necesaria para estimular la pubertad. La investigación demostró que estas células nerviosas productoras de GnRH no podían sobrevivir a la migración sin SEMA3E para protegerlos.

   El nuevo estudio, publicado en la revista 'Journal of Clinical Investigation', ubicó los genes responsables del síndrome de Kallman en los dos hermanos y luego verificó el efecto en el cultivo de tejidos y modelos de ratón. La causa del síndrome de Kallmann sigue siendo desconocido en el 60 por ciento de los casos, por lo que las técnicas utilizadas en el trabajo podrían emplearse para identificar nuevas causas genéticas.

   La investigación, financiada por 'UK Biotechnology and Biological Sciences Research Council' (BBSRC) y la italiana 'Fondazione Telethon', también da a los médicos una nueva causa genética confirmada que se podría analizar en los pacientes.

   El síndrome de Kallmann es una enfermedad rara que se estima que afecta a alrededor de 1 de cada 10.000 hombres y 1 de cada 50.000 mujeres, que puede tratarse con inyecciones de hormonas si se diagnostica a tiempo, pero cuyos casos son difíciles de confirmar, ya que sólo se ha identificado el 40 por ciento de las mutaciones genéticas que pueden causarla. El último estudio no sólo se suma a las mutaciones conocidas sino que también ofrece un nuevo método para analizar los casos "desconocidos" en busca de nuevas mutaciones.

   "Mediante la combinación de criterios clínicos y de laboratorio, hemos sido capaces de ir mucho más allá de la simple identificación de genes candidatos que podrían estar vinculados a una determinada enfermedad", explica la autora principal, la profesora Christiana Ruhrberg, del Instituto de Oftalmología de UCL.

   "Muchos estudios genéticos se basan en correlaciones estadísticas entre miles de pacientes, por lo que es difícil estudiar las enfermedades raras como el síndrome de Kallman. Nos las arreglamos para confirmar las causas genéticas usando muestras de sangre de sólo dos hermanos con el trastorno, que nacieron dos años de diferencia. Al recrear las mutaciones y ponerlas a prueba en las células neuronales en cultivo de tejidos y mediante el examen de los ratones nacidos sin los genes que estaban mutados en ambos hermanos, encontramos evidencia concreta que muestra cómo estas mutaciones causan realmente la patología", relata.

   El estudio demuestra un poderoso método para identificar las causas de las enfermedades genéticas sin depender de grandes muestras estadísticas. Esto se podría aplicar en los centros de investigación clínica que estudian muchas enfermedades raras, incluyendo el síndrome de Kallmann, para identificar las mutaciones.