MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los adultos con eczema atópico (EA) tienen significativamente más probabilidades de experimentar pensamientos suicidas, según desvela un nuevo estudio internacional, realizado por La Roche-Posay Laboratoire Dermatologique en colaboración con expertos internacionales en dermatitis atópica, provenientes del Hospital Saint Louis de París (Francia).
Los resultados se presentan en el Congreso 2025 de la Academia Europea de Dermatología y Venereología (EADV), que se celebra en París, Francia, y en línea del 17 al 20 de septiembre de 2025. El trabajo además revela los factores clave que impulsan este riesgo elevado.
Como una de las investigaciones globales más amplias para examinar el vínculo entre EA y la ideación suicida, el estudio 'Cicatrices de la Vida' encuestó a 30.801 adultos en 27 países en 2024. Entre ellos, 15.223 eran adultos con EA actual confirmado por un médico, mientras que 7.968 adultos sin EA sirvieron como controles.
Los participantes con EA actual se agruparon por edad de aparición del EA (infancia, adolescencia o adultez) y completaron un cuestionario detallado en línea que capturaba información sociodemográfica, ideación suicida autoinformada, gravedad de picazón y dolor de piel, gravedad del EA y experiencias de estigmatización relacionada con la piel.
Los resultados mostraron que el 13,2% de los adultos con EA reportaron ideación suicida, en comparación con el 8,5% de los adultos sin EA. Todos los subgrupos de EA, independientemente de si la afección comenzó en la infancia, la adolescencia o la edad adulta, presentaron mayor probabilidad de ideación suicida que los controles, lo que pone de relieve la amplia carga que esta afección supone para la salud mental.
Cabe destacar que el estudio identificó varios factores fuertemente asociados con la ideación suicida en adultos con EA. Los adultos más jóvenes, en particular los menores de 30 años, fueron más propensos a reportar pensamientos suicidas, al igual que las personas con obesidad.
Las características clínicas también desempeñaron un papel importante: los EA de moderados a graves duplicaron las probabilidades de ideación suicida, mientras que el prurito (picazón), el dolor de piel y la alta intensidad general de los síntomas se asociaron significativamente con un mayor riesgo.
Por otra parte, los factores psicosociales y del sueño contribuyeron aún más al riesgo. Los adultos con pensamientos suicidas reportaron mayores niveles de estigmatización y una mayor prevalencia de trastornos del sueño, con insomnio mixto (dificultad para conciliar el sueño y permanecer dormido) notablemente vinculado a la ideación suicida.
La doctora Delphine Kerob dermatóloga consultora en el Hospital Saint Louis de París, y directora científica de La Roche-Posay Laboratoire Dermatologique, es una de las investigadoras principales.
Según la misma: "Estos hallazgos revelan una perspectiva crucial de nuestro estudio a gran escala, que busca descubrir el impacto oculto a largo plazo de vivir con afecciones cutáneas inflamatorias comunes, como el eccema atópico. Los resultados destacan que los efectos del eccema atópico van más allá de lo superficial, y que los pensamientos suicidas representan una preocupación grave y frecuente que los profesionales sanitarios suelen pasar por alto", continuó.
"Al identificar los principales factores de riesgo que subyacen a la ideación suicida en esta población, esperamos que este estudio ayude a los profesionales sanitarios a reconocer y abordar mejor estos desafíos, apoyando así el bienestar general de los pacientes de forma más eficaz".
Al hablar sobre los próximos pasos de la investigación, Kerob apunta: "De cara al futuro, estamos investigando por qué la ideación suicida se presenta con diferentes tasas en distintos países, lo que podría reflejar importantes diferencias culturales. Al mismo tiempo, los análisis en curso del estudio 'Cicatrices de la Vida están mejorando nuestra comprensión de lo que ocurre bajo la superficie en los pacientes con eccema atópico".