MADRID, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consumo de té caliente está relacionado con un mayor riesgo de cáncer de esófago, según ha revelado una investigación de la Tehran University of Medical Sciences (Irán) publicado en la revista científica 'Internatiional Journal of Cancer).
En su estudio prospectivo, los investigadores examinaron la asociación entre la temperatura de consumo de té, medida tanto objetiva como subjetivamente al inicio del trabajo, con el riesgo futuro de carcinoma escamocelular esofágico. Midieron la temperatura del té usando métodos validados y recolectaron datos sobre otros hábitos de su consumo y potenciales factores de confusión de interés.
Durante el seguimiento, que incluyó a 50.045 personas de 40 a 75 años de edad durante una mediana de 10 años en Golestán, al noroeste de Irán, los investigadores iraníes identificaron 317 nuevos casos de cáncer de esófago. Beber 700 mililitros al día o más a una temperatura más alta de 60 grados centígrados se asoció con un riesgo un 90 por ciento mayor de cáncer de esófago.
Los responsables del trabajo explican que se han reportado tasas muy altas de incidencia de cáncer de esófago en la provincia de Golestán, donde el carcinoma escamocelular esofágico constituye más del 90 por ciento de los cánceres de esófago. Dos estudios previos de casos y controles de la provincia de Golestán ya evidenciaron anteriormente la misma asociación que ahora han demostrado en su estudio.
"Muchas personas disfrutan tomando té, café u otras bebidas calientes. Sin embargo, de acuerdo con nuestro informe, beber té muy caliente puede aumentar el riesgo de cáncer de esófago y, por lo tanto, es aconsejable esperar a que las bebidas calientes se enfríen antes de beber", explica el líder del estudio, Farhad Islami, que también es miembro de la American Cancer Society.
Otros trabajos, como un estudio en 450.000 personas publicado en la revista 'Annals of Internal Medicine' por científicos de la Fundación Nacional de Ciencias Naturales de China, ya encontraron que el consumo de té caliente está asociado a mayor riesgo de cáncer de esófago, en este caso entre aquellos que también beben alcohol y fuman cigarrillos.
El cáncer de esófago está aumentando en prevalencia y tiene índices de supervivencia pobres, particularmente en regiones menos desarrolladas y en hombres. China e Irán se encuentra entre los países con la mayor incidencia de cáncer de esófago. Los bebedores de té, además, son más propensos a fumar y beber alcohol. El tabaquismo y el consumo de alcohol, así como los compuestos químicos y los efectos térmicos adversos del té caliente, aumentan considerablemente el riesgo de cáncer.