MADRID, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una alimentación incorrecta o muy abundante ocasiona un incremento de las calorías ingeridas que implican sobrepeso u obesidad, problemas de salud muy serios, o interfieren en la percepción estética de la persona afectada.
Según especifica la Organización Mundial de la Salud, la causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es un desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas. Los datos que maneja la institución hablan de que, en 2016, el 39 por ciento de las personas adultas de 18 o más años tenían sobrepeso, y el 13 por ciento eran obesas.
No obstante, únicamente 500 calorías pueden separar a una persona de su peso ideal o hacer que viva en permanente peleada con la báscula. La especialista en nutrición y medicina estética del Centro Médico Lajo Plaza, la doctora Paula Rosso, proporciona 10 trucos para reducir en 500 el número de calorías ingeridas al día.
- Versión integral. La experta aconseja apostar por los carbohidratos integrales, como la pasta, el pan y el arroz. La diferencia calórica no es demasiado significativa, pero se come menos cantidad porque sacian más y su proceso digestivo es más lento.
- La merienda 'zero'. Roso recomienda saltarse el modo de preparación recomendado en el envase. Por ejemplo, mezclar gelatina dietética, que tiene sólo 12 calorías por sobre, después de añadir el vaso de agua caliente, con un yogurt desnatado. Pueden añadirse frutas cortadas. El total de calorías de esta merienda esmenos de 100, con todo el aporte de proteínas de la gelatina y las vitaminas de las frutas.
- 'Vade retro' procesados. Y no sólo por su elevado aporte calórico. Los alimentos procesados o refinados hacen que el organismo se acidifique provocando cansancio, infecciones o malestar estomacal.
- Mejor en crudo. Cada cucharada de aceite tiene 108 calorías. El beneficio de comer crudo, además del ahorro calórico, reside en que los alimentos crudos son más difíciles de digerir y hacen trabajar extra al aparato digestivo.
- ¿Refrescos y alcohol? Que sea 'sin'. Las bebidas alcohólicas como los tintos de verano o la cerveza 'cero' tienen menos de la mitad de calorías que la convencional. Cero es también el aporte calórico de los refrescos 0, pero si el problema son los gases y la hinchazón, es mejor optar por bebidas sin burbujas en su versión light.
- Light, con reservas. Por definición, un producto light es aquel que contiene como mínimo un 30 por ciento menos de calorías que su versión regular. Sin embargo, pueden contener azúcares y añadidos nada saludables. Además, se corre el riesgo de comer más cantidad de ellos creyéndonos a salvo de engordar.
- El pan, sólo a primera hora. La mañana es el mejor momento para poder incorporar hidratos como el pan que aportan energía durante un tiempo prolongado, pero es fundamental eliminarlo en cualquier otro momento del día. Prescindir de él en la comida y en la cena nos permite ahorrar hasta 300 calorías.
- Frutas a evitar. Las que tengan mayor aporte de azúcar, como la uva, el plátano, la papaya o el mango. Salvo que se haga ejercicio por la tarde, que se puede comer una fruta antes, es mejor reservar las frutas a las primeras horas del día. Las menos calóricas son la pera, la mandarina, la fresa, el melón, la sandía, la manzana y el kiwi.
- La cantidad justa. La doctora aconseja comeren plato de postre, no llevar la fuente a la mesa e intentar cocinar para que no sobre nada. Las raciones mini "que son más que suficientes", explica, permiten consumir hasta un 30 por ciento menos de calorías de cada plato.
- Adelántate a la situación. "Si tomas algo fuera de casa, suplica al camarero que no te traiga patatas con la bebida. Una vez las veas en la mesa te será más difícil pedir que se las lleven", indica la experta. "Haz lo mismo si vas a un restaurante. Pide expresamente que el filete venga solo o con verduras. El 'no voy a comer pan' también funciona. Una vez las veas en la mesa te será más difícil dar el cambiazo", subraya Rosso.
La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria recuerda, asimismo, que "la formación de buenos hábitos alimentarios es un excelente instrumento para prevenir las enfermedades y promover la salud" e insta a planificar una alimentación saludable.