MADRID, 9 Nov. (EDIZIONES) -
La obesidad y el sobrepeso provocan la muerte cada año de 2,6 millones de personas en todo el mundo, una enfermedad cuya tasa se ha duplicado y que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), está alcanzando "proporciones epidémicas".
Ante estos datos, y debido a que cada año mueren en España 131.000 personas por exceso de peso, la asociación American Pistachio Growers ha ofrecido cinco razones por las que comer pistachos puede ayudar a combatir la obesidad.
1. Contribuyen a reducir el riesgo de padecer obesidad. Distintos estudios concluyen que las personas adultas que incorporan pistachos en su dieta, en comparación con las que no lo hacen, pueden presentar un peso menor. Además, estudios publicados en 2012 y 2013 sugieren que el consumo de frutos secos, incluyendo los pistachos, puede contribuir a la prevención de la obesidad.
Según estas investigaciones el consumo de frutos secos no está relacionado con el aumento de peso y que consumir frecuentemente frutos secos, en cantidades recomendadas, no se asocia a un incremento de peso. De hecho, su alto contenido en fibra y proteínas favorece la saciedad, lo que contribuye al control del peso corporal.
2. Ayudan a disminuir el índice de masa corporal. Un estudio científico concluye que el consumo regular de pistachos puede disminuir el índice de masa corporal. La investigación se ha realizado con mujeres de edades comprendidas entre los 20 y 65 años, que consumieron o bien 53 gramos de pistachos o 56 gramos de galletas 'preztel' como parte de una dieta calórica de pérdida de peso controlada.
En concreto, mientras que ambos grupos redujeron peso durante el estudio de 12 semanas, aquellos individuos que siguieron la dieta ingiriendo pistachos bajaron de forma más significativa su índice de masa corporal. Unos datos que, a juicio de la organización, demuestran que es posible incluir raciones controladas de pistachos como aperitivo en programas de control de peso.
LAS CÁSCARAS REDUCEN LAS CALORÍAS INGERIDAS
3. Las cáscaras de los pistachos ayudan a reducir el total de las calorías ingeridas. Una ventaja del pistacho americano en el control de peso es su cáscara. En este sentido, según ha señalado la asociación, un estudio realizado en 20114 corrobora la hipótesis que la cáscara de los pistachos contribuye a la reducción de la ingesta calórica.
"Los autores del estudio demuestran que en la ingesta del fruto seco con cáscara se consumen menos calorías, y que la diferencia puede ser debida al tiempo que es necesario para descascarar los pistachos. Además, las cáscaras vacías actúan como una señal visual para el consumidor. El proceso de descascarar ralentiza el proceso de comer y visualizar las cáscaras vacías funciona como señal para parar la ingesta aumentando, así, la sensación de haber comido ya lo necesario", ha informado American Pistachio Growers.
4. Aumentan la sensación de saciedad. La saciedad, la sensación de estar lleno después de comer, es un componente importante en el control de peso y puede influir en la frecuencia de la ingesta de alimentos. Las evidencias indican que todos los frutos secos ayudan a sentirse saciado, a suprimir el hambre y a reducir la necesidad de comer en exceso.
5. Contienen menos kilocalorías y más fibra y proteínas vegetales por ración. Una ración de pistachos equivale aproximadamente a unas 49 unidades y contiene 164 kilocalorías. Comparado con otros frutos secos como las nueces (195 kcal), los anacardos (171 kcal), las almendras (176 kcal) y las avellanas (191 kcal), los pistachos tienen menos calorías por ración. También cabe destacar que el pistacho es rico en fibra (2,9 g por ración) y una fuente de proteínas (5,9 g por ración).