No existe obligación legal para identificar como tales a los productos cárnicos procesados

Actualizado: lunes, 26 octubre 2015 18:29

   MADRID, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -

   Las "carnes procesadas" de cuyo consumo ha advertido la Organización Mundial de la Salud (OMS) por elevar el riesgo de cáncer de colon se refieren a todas las que han sido sometidas a "un proceso de transformación con el objetivo de conseguir una mejor conservación o una mejora de las aptitudes organolépticas" y no existe una obligación legal para que los productores los identifiquen como producto cárnico procesado, indicó a Europa Press el experto en Derecho Alimentario especializado en la asesoría para nuevos emprendedores, José Miguel García Viejo.

   En concreto, García Viejo explica que los procesamientos a los que hace referencia la OMS son tan "variados y generales" como "la salazón, el curado, la fermentación, el ahumado u otros" métodos encaminados a "mejorar el sabor o la conservación" de la carne. "Desde un jamón, hasta un aperitivo cárnico tipo cecina o una salchicha cualquiera" aparecen incluidos en estos procesos, indica.

   En cuanto al etiquetado, García Viejo, que es socio fundador del despacho Montesinos Viejo Abogados, explica que en la legislación española la referencia más parecida a la carne procesada es la de "productos cárnicos".

   En todo caso, advierte de que "no existe una manera única de identificación ni una obligación 'per se' en la legislación alimentaria europea que obligue al operador a hacer indicación de que se trata de un "producto cárnico transformado".

   Una forma de identificación sería la correspondiente a la denominación obligatoria del alimento, en la que se puede distinguir el "producto cárnico" de la "carne fresca", si bien "la legislación (Reglamento 1169/2011) permite al operador el uso de una denominación basada en la habitualidad del nombre común", señala el experto.

'SALCHICHA' EN VEZ DE 'PRODUCTO CÁRNICO'

   De esta forma, se permite el uso del término 'salchicha' como mejor descriptor del producto que el término 'producto cárnico'", licencia que, a juicio de García Viejo, "tiene mucho sentido, pues es en el interés del consumidor poder diferenciar una salchicha de lo que no lo es". "Englobar a todos los 'productos cárnicos' bajo una única denominación sería una muy mala idea desde el punto de vista de la industria y también del consumidor", afirma.

   Ante las dudas que puede generar el etiquetado, el experto de Montesinos Viejo Abogados apela a la "cultura de la alimentación" y a la necesidad de que la misma se amplíe cada vez más al consumidor medio.

   "Es posible identificar fácilmente los productos transformados de los que no lo son. Sólo hace falta un poco de conocimiento. El operador está obligado a llamar a cada cosa por su nombre, pero depende del consumidor, y siempre va a depender de él hasta cierto punto, saber qué significa ese nombre", afirma.

   García Viejo considera además que las recomendaciones de la OMS no significan que los alimentos dejen de ser seguros. En Europa, existe una agencia (EFSA) y unas instituciones (DG SANCO) que velan por la seguridad alimentaria, y que evalúan los riesgos inherentes a todos los alimentos y sus procesamientos, señala.

PRINCIPIO DE CAUTELA

   "Aquellos alimentos que no son encontrados seguros, no pueden en ningún caso ser puestos en el mercado europeo bajo el principio de cautela. No sabemos si la evaluación de la OMS hará que la Agencia Europea se replantee la realización de nuevas evaluaciones", indica.

   "En cualquier caso, se considera que de así hacerlo, EFSA y la Dirección General de Salud y Consumidores (DG SANCO) deberían tomar una propuesta informativa que pase por el fomento y ampliación de la cultura del consumidor medio, y en ningún caso restrictiva hacia la producción. Sería una pena que se tomase una posición demasiado conservadora a este respecto. No olvidemos que en el mismo grupo en el que hoy la OMS incluye a las carnes procesadas también están también cualquier bebida alcohólica o hasta los rayos solares", añade García Viejo.