MADRID, 11 Ago. (EUROPA PRESS) -
El 65,5 por ciento de los españoles afirma comer más platos precocinados, comida envasada y bollería que sus padres a su edad y el 67 por ciento reconoce que lleva una vida sedentaria, según la 11ª Edición del Panel sobre Hábitos Saludables de Herbalife.
"La nutrición es un concepto muy importante que tenemos que tener en cuenta a la hora de concebir una alimentación sana pero vivimos inmersos en un ritmo de vida frenético que apenas nos deja tiempo para preocuparnos por estos aspectos. Comemos para saciarnos y no para nutrirnos, cuando son dos aspectos que deben ir siempre de la mano", ha alertado el especialista en medicina deportiva, nutrición y miembro de Herbalife, Julián Álvarez.
En este sentido, el 93 por ciento de los encuestados sabe que alimentos debe consumir y cuáles no pero el 63 por ciento prefiere consumir otro tipo de alimentos no tan saludables porque no les convence el sabor de los productos.
Sin embargo, una correcta nutrición debe estar acompañada de ejercicio físico y, aunque el 55 por ciento suele realizar algún deporte, a un 82 por ciento le gustaría dedicar más tiempo a practicar actividades físicas.
"El riesgo cardiovascular ha aumentado principalmente debido a la falta de ejercicio físico y, en comparación con generaciones anteriores, la alimentación es menos sana, aunque hoy en día contemos con mayor variedad de productos para ayudar a mejorar la alimentación", ha subrayado el doctor Julián Álvarez.
Uno de los problemas añadidos es el coste de comer fuera de casa ya que, según el Informe sobre Consumo de Alimentación en España publicado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, los españoles gastan más del 30 por ciento de su presupuesto en comer fuera.
Respecto a este dato, la encuesta revela que uno de cada cinco españoles come fuera, lo que les impide llevar una alimentación sana y, destacan, que comer saludable es caro.
