MADRID, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
El fabricante neozelandés DGC acaba de lanzar en España 'Capricare', la primera leche de fórmula para bebés hecha a base de leche entera de cabra, que mantiene los componentes naturales presentes en la leche como son las grasas, las vitaminas y los minerales.
Este producto, que se comercializa con éxito este producto en 20 países de todo el mundo, a diferencia de la leche de vaca, tiene predominantemente un proceso de secreción que libera componentes celulares presentes en la leche como nucleótidos y aminoácidos libres.
"Este proceso de secreción que conserva más componentes celulares se denomina Secreción Apocrina y es predominante en humanos y cabras. El proceso de secreción predominante en la leche de vaca es el denominado secreción merocrina y no conserva tantos componentes celulares", explican.
La mayoría de otras fórmulas infantiles utilizan procesos de fabricación más complejos descomponiendo la leche a través del proceso del suero. "'Capricare' utiliza un proceso de fabricación sencillo y natural, añadiendo a la leche entera solamente elementos esenciales como vitaminas, minerales y otros nutrientes para cumplir con los requisitos reglamentarios para hacer una fórmula nutricionalmente completa para bebés de más de 6 meses", advierte.
La leche entera de cabra tiene un 46 por ciento más de ácidos grasos de cadena media que la leche de vaca. Estos ácidos grasos de cadena media tienen una absorción más eficiente que los de cadena larga.
Por otro lado, Capricare, al estar fabricado con leche entera de cabra, incluye los ácidos grasos que se encuentran de forma natural en la grasa de la leche. Un bebé necesita entre un 40 y 50 por ciento de su energía proveniente de las grasas.
Las fórmulas de 'Capricare' son el resultado de más de 20 años de investigación sobre nutrición de la leche de cabra para niños incluyendo estudios de doble ciego.