La dieta baja en grasas reduce el riesgo de muerte por cáncer de mama

Restringir las horas de comer ayuda a controlar niveles de glucosa en la sangre en personas en riesgo de diabetes tipo
PIXABAY - Archivo
Publicado: lunes, 3 junio 2019 7:35


CHICAGO, 3 Jun. (De la enviada especial de Europa Press, Lucila Rodríguez) -

Las mujeres postmenopaúsicas que tienen una dieta equilibrada y baja en grasas tienen un 21 por ciento menos de riesgo de muerte por cáncer de mama, en comparación con aquellas que llevan comen más grasas, según los resultados de un ensayo clínico realizado por Women's Health Initiative (WHI), y que han sido presentados en el Congreso de la Sociedad Americana de Oncología (ASCO, por sus siglas en inglés), que estos días se celebra en Chicago (Estados Unidos).

"Es el primer ensayo controlado aleatorizado que demuestra que una dieta saludable puede reducir el riesgo de muerte por este tumor", ha dicho el autor principal del trabajo, Rowan Chlebowski, quien ha
recordado que una dieta equilibrada y baja en grasas se basa en la ingesta diaria de frutas, verduras y cereales.

Para alcanzar esta conclusión, los expertos analizaron a 48,835 mujeres postmenopáusicas de 50 a 79 años sin antecenetes de cáncer de mama. Entre los años 1993 y 1998 las asignaron aleatoriamente en dos grupos: uno en el que tenían que seguir una dieta normal, en la que la
grasa representaba el 32 por ciento, o más de las calorías diarias; y otro en el que se reducía el consumo de grasa al 20 por ciento, o menos, de la ingesta calórica y, además, incluía una porción de verdura, fruta y cereales.

Las mujeres del grupo de dieta equilibrada y baja en grasa se adhirieron a la misma durante aproximadamente 8,5 años, si bien los investigadores continuaron observándolas durante años con el fin de comprobar si morían por cáncer de mama o por cualquier otra causa. Hasta el momento, el ensayo ha seguido a los participantes durante una mediana de 19,6 años, y se diagnosticaron 3,374 casos de cáncer de mama en el grupo entre 1993 y 2013.

Los resultados han evidenciado que entre las mujeres que habían seguido una dieta baja en grasas tenían un 15 por ciento menos de riesgo de muerte por cualquier causa, tras un diagnóstico de cáncer de mama, y un 21 por ciento de riesgo de fallecimiento por la enfermedad.

Leer más acerca de: