MADRID, 11 Jul. (EDIZIONES) -
Según los científicos de la Administración de Alimentos y Medicamentos norteamericana (FDA, por sus siglas en inglés), la cafeína puede ser parte de una dieta saludable para la mayor parte de la gente, pero demasiada cafeína puede poner en peligro su salud.
"Dependiendo de factores tales como el peso, los medicamentos que pueda estar tomando, y la sensibilidad individual, lo que es 'demasiado' puede variar de una persona a otra", advierte la entidad científica norteamericana.
Mientras, en una entrevista con Infosalus, el presidente de la Fundación Alimentación Saludable, Jesús Román, coincide con la FDA en que "ciertamente" la cafeína sí puede ser buena para nuestra salud: "Algunas personas se benefician de su consumo al potenciar la concentración y favorecer el rendimiento y la capacidad de atención. Debido a su contenido en substancias antioxidantes, el café se ha descrito como un posible factor protector frente a enfermedades neurodegenerativas, aunque desde luego queda aún mucho que investigar al respecto".
En concreto, Román recuerda que el café que tomamos hoy en día en todo el mundo no es más que una infusión de una planta, como tantas otras que se beben. "La peculiaridad del café es que no se infusiona la hierba, la raíz, o las hojas, sino los granos tostados", aprecia este experto en Nutrición.
El origen dice que parece estar en Etiopía, de donde pasó a otros países de la zona como Egipto y Yemen, por ejemplo. En cambio, indica que las variedades de café que se consumen son de diferentes partes del planeta, desde América hasta Asia.
"El paso decisivo tuvo lugar cuando el grano del café se sometió al tueste, un elemento clave para que se produzcan los aromas que gustan a los amantes del café", valora el dietista-nutricionista.
CÓMO EL CAFÉ AFECTA AL ORGANISMO
Con todo ello, Román advierte de que el café contiene diferentes compuestos químicos a los que debe su acción: "El más destacado es la cafeína, pero no el único. Su efecto sobre el organismo es conocido desde antiguo, pero éste depende de muchos factores como la dosis, el tamaño corporal, la eficiencia metabólica del individuo, el modo de infusión o la extracción de la cafeína, entre otros puntos".
A partir de cierta cantidad de cafeína, advierte de que el efecto negativo puede producirse, y suele estar relacionado con una sobreexcitación del sistema nervioso, manifestándose ansiedad, nerviosismo, o insomnio, por ejemplo.
"Otros efectos se han discutido también, como su posible efecto perjudicial para el feto en las mujeres embarazadas, la interacción con ciertos medicamentos y otros", añade.
Para la mayor parte de los adultos sanos, consumir hasta 400 miligramos de cafeína al día parece seguro, según indica Román; lo que equivaldría a unas 4 tazas de café de filtro, 10 latas de refrescos de cola, o 2 bebidas de esas denominadas 'energizantes'. "Esto es lo que recomienda la autoridad sanitaria de Estados Unidos (FDA). Atención porque el contenido de cafeína de cada bebida puede ser muy variable", apostilla.
Desde luego, sí hace hincapié este experto en Nutrición en que el consumo de cafeína no es recomendable para niños y ve preferible evitar en todo caso la mezcla con el alcohol y con otros tóxicos.
"En Europa, la Agencia correspondiente ha señalado que dosis únicas de cafeína de hasta 200 mg no presentan problemas de seguridad para la población adulta sana general. Eso sí, remarcan que no hay estudios disponibles sobre los efectos en embarazadas o en personas de mediana edad y de edad avanzada", alerta.
También señala que las dosis únicas de 100 mg de cafeína pueden afectar a la duración y a los patrones de calidad del sueño en adultos, y si se consumen antes de acostarse.
"Las citadas ingestas de cafeína de hasta 400 mg al día en efecto, se tiende a considerar que no tienen efectos perjudiciales para la salud de los adultos en la población general, excepto en el caso de las embarazadas. En esos casos, las mujeres embarazadas / lactantes no deberían ingerir más de 200 mg al día consumidas a lo largo del día", añade Román.
DÓNDE HAY CAFEINA
En última instancia, el presidente de la Fundación Alimentación Saludable concreta que la cafeína se encuentra sólo en productos de origen vegetal, y bajo diferentes fórmulas químicas en el café, en el té, guaraná y en el mate especialmente, así como en el chocolate.
Sobre si el café descafeinado tiene cafeína, Román asegura que tiene poca, pero sí tiene. "Así, el café descafeinado contiene alrededor de 2 - 15 miligramos por taza. Las personas muy sensibles tienen que tener cuidado", sentencia el presidente de la Fundación Alimentación Saludable.