MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La gota es una patología que afecta a las articulaciones con uno o dos casos por cada 1.000 personas al año, principalmente varones de más de 40 años, según afirma el reumatólogo de Hospiten, José Luis Rosales. Los alimentos ricos en purinas, carnes rojas, alcohol o marisco son los que pueden desencadenarla.
ENFERMEDAD DE LA GOTA
Dolor, calor, hinchazón y enrojecimiento son algunos de los síntomas de la gota, que a pesar de ser una patología muy antigua, todavía no está erradicada. Según indica la Sociedad Española de Reumatología, entre un uno y un dos por ciento de la población la padece.
La gota aparece por un incremento de los niveles de ácido úrico en sangre. Esto ocurre por la descomposición de unas sustancias llamadas purinas que se encuentran en carnes rojas, alcohol, mariscos o vísceras. Cuando las purinas se degradan, se produce un aumento en la producción de ácido úrico que los riñones en muchos casos, no pueden filtrar y se acumula en las articulaciones, provocando las crisis de gota.
Pero también se padece por otros factores diferentes a la alimentación. El abuso de medicamentos diuréticos, padecer enfermedades cardiovasculares, ayunos prolongados o alguna alteración genética, pueden ser desencadenantes, según comenta le doctor Rosales.
En estos momentos existen medicamentos que ayudan a mantener unos correctos niveles de ácido úrico para evitar estas crisis. Además, se ha comenzado a comercializar una medicación para los pacientes que sufren insuficiencia renal. Sin embargo, según recomienda Hospiten, el tratamiento depende de cada perfil. Lo que sí que es aconsejable es llevar una dieta baja en purinas, mantener el peso e incrementar el ejercicio físico.