MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
El consumo de por lo menos tres porciones de productos lácteos bajos en grasa al día está asociado con un mayor riesgo de desarrollar enfermedad de Parkinson en comparación con consumir menos de una porción al día, según un amplio estudio publicado en la edición digital de este miércoles de 'Neurology', la revista médica de la Academia Americana de Neurología.
Además, beber más de una porción de leche baja en grasa o desnatada por día se asocia con un mayor riesgo de desarrollar enfermedad de Parkinson en comparación con beber menos de una porción por semana. Los resultados del estudio no muestran que los productos lácteos causan la enfermedad de Parkinson, sino que sólo muestran una asociación.
"Nuestro estudio es el mayor análisis de productos lácteos y de Parkinson hasta la fecha", afirma Katherine C. Hughes, de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de la Universidad de Harvard, en Boston, Estados Unidos. "Los resultados proporcionan evidencia de un modesto aumento del riesgo de Parkinson con un mayor consumo de productos lácteos bajos en grasa, y estos productos lácteos, que son ampliamente consumidos, podrían ser un factor de riesgo modificable para la enfermedad", añade.
Para el estudio, los investigadores analizaron aproximadamente 25 años de datos sobre 80.736 mujeres inscritas en el 'Nurses 'Health Study' y 48.610 hombres inscritos en el 'Health Professionals' Follow-up Study'. Los participantes en estos análisis completaron cuestionarios de salud cada dos años y cuestionarios sobre su dieta cada cuatro años. Durante ese tiempo, 1.036 personas desarrollaron Parkinson.
Los autores examinaron qué tipo de productos lácteos consumía cada persona, incluyendo leche, crema, queso, yogur, helado, mantequilla, margarina y sorbete. A continuación, evaluaron si los productos lácteos de grasa completa, como la leche entera, se vinculaban con un riesgo de enfermedad de Parkinson; pero no hubo asociación.
TIENEN UN 39 POR CIENTO MÁS DE PROBABILIDADES DE DESARROLLAR PARKINSON
Sin embargo, los que consumieron al menos tres porciones de productos lácteos bajos en grasa al día tuvieron un 34 por ciento más de probabilidades de desarrollar Parkinson que las personas que ingerían menos de una porción al día. Los investigadores también encontraron que, al mirar específicamente el consumo de leche desnatada y baja en grasa, había un 39 por ciento más de probabilidades de desarrollar Parkinson para personas que consumían más de una porción por día en comparación con aquellas que tomaban menos de una porción por semana.
Comer sorbete o yogur congelado también se relacionó con un modesto aumento del riesgo. En un meta-análisis, analizando grupo de estudios, los investigadores encontraron que la ingesta total de productos lácteos se relación con un mayor riesgo de enfermedad de Parkinson. Las conclusiones generales de estos estudios fueron que el consumo frecuente de productos lácteos se asoció con un modesto incremento del riesgo de Parkinson.
No obstante, es importante tener en cuenta que el riesgo de desarrollar Parkinson sigue siendo muy bajo. De las 5.830 personas que consumieron por lo menos tres porciones de productos lácteos bajos en grasa al inicio del estudio, sólo 60 personas, o 1 por ciento, desarrollaron la enfermedad durante el periodo de estudio. En comparación, de las 77.864 personas que tomaron menos de una porción por día de productos lácteos bajos en grasa, 483 personas, o el 0,6 por ciento, desarrollaron Parkinson.
"El consumo frecuente de productos lácteos bajos en grasa se relacionó con un modesto aumento del riesgo de padecer la enfermedad de Parkinson", afirma Hughes. Una limitación del estudio fue que los primeros síntomas de Parkinson pueden haber afectado a los comportamientos dietéticos y las respuestas al cuestionario de los participantes del estudio, por lo que los autores creen que hacen falta más investigaciones antes de hacer recomendaciones sobre el consumo de productos lácteos.