MADRID, 3 Dic. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigación internacional de Austria y Luxemburgo ha descubierto que la proteína parvalbúmina, que generalmente desencadena la alergia al pescado, es mucho menos alergénica en los peces cartilaginosos, como varias especies de tiburones y rayas, que en los peces óseos, es decir, todos aquellos dotados de esqueleto interno óseo.
La alergia al pescado es una de las alergias alimentarias más peligrosas, ya que a menudo se asocia con síntomas potencialmente mortales, como el shock anafiláctico. Las personas que son alérgicas al pescado no solo están expuestas al riesgo al comer pescado, sino también a inhalar accidentalmente humos de pescado en mercados o restaurantes o por contacto con la piel.
Los responsables del estudio, del Instituto de Fisiopatología e Investigación de Alergias de la Universidad Médica de Viena (Austria), Heimo Breiteneder y Tanja Kalic, así como expertos en alergias alimentarias de Luxemburgo, Annette Kuehn y Martine Morisset, demostró que la parvalbúmina es mucho menos alergénica en la carne de los peces cartilaginosos, , que en la carne de los peces óseos más comúnmente consumidos.
En el estudio, la raya espinosa, un pez cartilaginoso, se identificó claramente como una alternativa nutricional potencial para las personas con alergia al pescado. Estas rayas son muy comunes y se pueden encontrar en el Atlántico este, alrededor de Noruega, el Mar del Norte e incluso Namibia. Sus aletas pectorales en forma de ala se cocinan como un filete.
A pesar de tener una alergia comprobada, 10 de los 11 sujetos de prueba pudieron comer este pescado sin sufrir ninguna forma de reacción alérgica. "Siempre que los alérgicos consulten primero a un especialista en alergias adecuado y se realicen pruebas de tolerancia potencial a la raya espinosa, podría haber una alternativa inesperada para las personas que todavía desean comer pescado", comentan los investigadores.
Ahora, los investigadores planean extender el estudio, que inicialmente se concentró en la población europea, para mejorar en última instancia la calidad de vida de las personas alérgicas a los peces en todo el mundo. Además, están trabajando para comprobar la gama de peces que las personas alérgicas a los peces pueden comer de manera segura.