LAS PALMAS DE GRAN CANARIA 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El profesor y presidente del III Congreso Mundial de Nutrición y Salud Pública, así como miembro del Comité Científico del European Hidratation Institute, Lluís Serra-Majem, ha destacado que entre un 10 y 20 por ciento de la población se encuentra por debajo de los niveles de una buena nutrición a consecuencia de la crisis económica.
Así, afirma en declaraciones a Europa Press, que la crisis económica está afectando a la buena nutrición en el primer mundo, lo que también puede influenciar la calidad de vida y a lo que sumó que la alimentación está "muy unida" al deporte.
Para Serra-Majem las familias españolas han tenido "mala adaptación" a la situación actual de crisis en cuanto a la alimentación, ya que recordó que antes los ciudadanos españoles "sabían manejarse muy bien con pocos recursos" en relación a que había "una ciencia de la cocina de aprovechamiento muy importante" con productos "relativamente económicos", entre los que citó el arroz o la pasta, que debidamente cocinados admitió contribuyen a una nutrición adecuada.
A lo que añadió que la "falta de tiempo" que actualmente tienen las personas también contribuye, si bien señaló que de las cuatro horas y media que pasan los ciudadanos frente a la televisión, una se podría dedicar a cocinar, por lo que apuntó que "hay mucho cambio por hacer".
Cuestionado por la situación de España en relación a la nutrición, el profesor Serra-Majem aseguró que "está muy bien, en la línea alta", además en España la esperanza de vida, recordó, "es de las más altas del mundo", si bien reconoció que ha aumentado la obesidad principalmente "por el sedentarismo".
Sobre esto último, dijo, toda la costa Mediterránea junto a Baleares y Canarias tienen altos índices de obesidad, lo que ha relacionado con el "boom del turismo", lo que ha implicado una "erosión muy importante y de costumbres", predominando el "fast food o el horrible plato combinado".
DIETA MEDITERRÁNEA Y DEPORTE
Para el profesor Serra-Majem hay que reforzar la Dieta Mediterránea porque, indicó, España produce el 46 por ciento de aceite de oliva de todo el mundo, aspecto que consideró los políticos se lo "están dejando escapar".
Además, agregó, que en la Dieta Mediterránea que "mejor chuches que unas buenas nueces". Todo ello para apuntar que en el caso concreto de Canarias los productos que conforman la pirámide de una buena alimentación se encuentran en el archipiélago, de ahí que dijo se debe "ir recuperando" porque la dieta "es también cultura, medioambiente, el impacto medioambiental es fundamental".
Asimismo, apuntó que la alimentación debe ir de la mano del deporte, del ejercicio físico, incidiendo en que no se deben recortar horas en la escuela sino incrementarlas porque apuntó que la promoción del deporte debería hacerse de "forma obligada", tendrían que ser "políticas obligadas".
En este sentido, abogó porque en las ciudades se fomenten más espacios para ir en bicicletas, se potencien las zonas para hacer ejercicio, todo ello "es básico".
Al respecto, y en relación a la alimentación sana, incidió en la necesidad de crear huerto comunitarios para ayudar a comer bien.
MUEREN 3 MILLONES DE PERSONAS
En cuanto al mundo global, apuntó que anualmente fallecen tres millones de personas, de los que la mayoría son menores de 5 años. En este sentido, destacó que la situación de África "es crucial", ya que se trata del "único" continente donde la "nutrición no mejora", por lo que apuntó que "es imposible que se mejore, sino mejora en África".
Para que mejore la nutrición en el continente vecino, dijo, es necesario "intensificar la cooperación" aunque, aseguró, que "buena parte del empeoramiento se debe a las consecuencias del cambio climático en muchos países africanos, por la disminución de los recursos hídricos y desertización", a lo que sumó el hecho de que en la agenda política se contemplan guerras.
Para una buena nutrición, afirmó, que el agua "es importante, luego están los recursos para cultivar" las mejores especies en cada caso, a lo que sumó la educación, es decir, enseñar a las madres qué pueden o no pueden dar a los niños.
Finalmente, llamó la atención sobre el hecho de que en África coexista la obesidad, en las clases sociales más pudiente, con la desnutrición.