El tratamiento con CPAP mejora la calidad de vida de ancianos con apnea

Actualizado: lunes, 8 junio 2015 14:05

MADRID, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -

   Los primeros resultados del ensayo 'Obstructive sleep apnoea in the elderly: role of continuous positive airway pressure treatment. A randomised, controlled trial', publicado recientemente en la revista 'European Respiratory Journal', han demostrado que el tratamiento con presión positiva continua en la vía aérea (CPAP) en pacientes ancianos con apnea del sueño grave, mejora su calidad de vida, que se perciben especialmente en los síntomas diurnos y nocturnos y en la esfera social y emocional.

   "La edad no debería ser un impedimento para la prescripción de CPAP en ancianos con apnea del sueño grave", ha afirmado el neumólogo, primer firmante del artículo y miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica, el doctor Miguel Ángel Martínez García.

   La pirámide poblacional está sufriendo cambios importantes. El porcentaje de pacientes ancianos está experimentando un incremento progresivo en los países industrializados, por lo que este escenario conlleva que el diagnóstico y el tratamiento de la apnea del sueño en la población anciana se están convirtiendo en un escenario habitual en las unidades del sueño.

   Por ello, el CPAP es el tratamiento indicado para los casos de apnea obstructiva del sueño sintomática o grave. Sin embargo, todos los ensayos clínicos publicados hasta el momento sobre el efecto de este tratamiento han incluido solamente pacientes de mediana edad.

  "A diferencia de las investigaciones realizadas hasta el momento, los resultados obtenidos se centran únicamente en pacientes ancianos", ha señalado el doctor  Martínez García, que ha añadido que esto permite ajustar el abordaje de la apnea del sueño a la realidad poblacional del momento para poder afrontar de una forma más eficaz el aumento de sospechas clínicas de apnea del sueño en las unidades del sueño de España.

   El tratamiento con CPAP en población de edad avanzada mejora los síntomas relacionados con el sueño, como los ronquidos, las crisis asfícticas, las pesadillas, la nicturia y la hipersomnolencia diurna, además de que también favorece el control de la esfera emocional, porque reduce los índices de depresión y ansiedad.

   Sin embargo, en la población anciana, el efecto negativo de los desordenes respiratorios del sueño también tiene impacto en algunas de las funciones neurocognitivas. "El tratamiento con CPAP también conlleva mejoras neurocognitivas, que se observan especialmente en aspectos relacionados con la memoria y las funciones ejecutivas", ha asegurado el doctor Martínez.

   Por último, otro aspecto clave de la investigación es que el 70 por ciento de los pacientes ancianos toleran adecuadamente el tratamiento con CPAP al menos durante cuatro horas por la noche de media, que es el número de horas mínimo que se considera efectivo.