MADRID, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las personas mayores suelen dormir menos que los jóvenes debido, entre otros aspectos, a la reducción de los niveles de melatonina, es decir, la hormona que regula el ciclo del sueño, según ha informado la Agencia Navarra para la Autonomía de las Personas (ANAP), con motivo de la celebración de sus talleres de 'Higiene del sueño'.
De hecho, las personas mayores tienen un sueño menos profundo y más entrecortado y es normal que a partir de los 70 años se despierten varias veces durante la noche. Todo ello provoca que aparezca fatiga, somnolencia diurna en situaciones poco estimulantes e, incluso, reducción de las capacidades cognitivas, pérdida de memoria y sensación de desmotivación.
Con el fin de conseguir que las personas mayores tengan una mejor calidad del sueño y, por ende, se reduzcan estos síntomas, la asociación ha destacado la importancia que tiene acostarse y despertarse siempre a la misma hora para acostumbrar al organismo y dormir de forma profunda y seguida durante varias horas.
Además, prosigue, es necesario que se utilice la cama sólo para dormir con el fin de que el cerebro identifique este lugar como zona de descanso; se tome un vaso de leche o se realicen ejercicios de relajación antes de conciliar el sueño; y no se consuma ni cafeína ni alcohol antes de ir a dormir.
Del mismo modo, ANAP recomienda cenar ligero; tener un buen colchón y una buena una almohada; dormir en un ambiente con una temperatura de unos 20 grados, suficiente oscuridad y ausencia de ruido; no tomar medicamentos que no estén prescritos por un médico; mantener un ritmo de vida activo para llegar cansados a la noche; y no obsesionarse con conciliar el sueño porque, así, se aumenta el nerviosismo y empeora el problema.