MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -
El 86 por ciento de los españoles espera mantenerse activo en la vejez y un 64 por ciento dice que la edad no le impedirá disfrutar de la vida, según ha mostrado el estudio 'Actitudes hacia el envejecimiento', realizado por Sanitas y Bupa y en el que se han encuestado a unas 1.000 personas.
Asimismo, tener buena salud es, con diferencia, el aspecto que más señalan los españoles para ser felices a pesar de los años. En este sentido, un 85 por ciento de los encuestados relaciona una vida feliz con una vida sana. En porcentajes muy similares, otros aspectos vinculados a la felicidad son una buena forma física, en el 69 por ciento de los casos; tener una posición económica desahogada, en el 68 por ciento, y estar cerca de los seres queridos en el 66 por ciento.
Por otra parte, el ocio y los viajes, se encuentran entre las principales actividades en las que los españoles invertirían su dinero al jubilarse con un 80 por ciento de los encuestados. "La toma de conciencia del envejecimiento es progresiva y requiere una adaptación paulatina. El llevar este proceso vital de la manera más saludable y en el mejor estado de forma posibles son variables sobre las que se puede influir si se adopta un estilo de vida saludable desde una edad temprana. Sería deseable que pudiéramos pensar en la vejez con esta perspectiva temporal ya que, dentro de los achaques propios de la edad, un estado físico razonable es fuente de calidad de vida y bienestar", ha recalcado el jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Mayores, David Curto.
¿QUIÉN CUIDARÁ DE NOSOTROS EN LA VEJEZ?
Esta visión positiva no está exenta de preocupaciones, puesto que la principal, para el 64 por ciento de los encuestados, es cómo mantenerse sano e independiente a pesar de los años. Además, más de la mitad se plantea cuanto dinero necesitará para afrontar esta etapa y un 47 por ciento qué pasará si cae enfermo.
En general, la vejez está bastante presente en los pensamientos de los españoles. De hecho, el trabajo ha revelado cómo un 12 por ciento de las personas de entre 25 y 45 años se cuestiona a diario cómo será su vida de mayor; un 20 por ciento lo hace varias veces por semana y un 8 por ciento, al menos, una vez a la semana.
En el caso de necesitar cuidados y ayuda en el futuro, una de cada cuatro personas afirma no saber quién se ocupará de su atención, mientras que el 60 por ciento sitúa esta responsabilidad en la familia. Del mismo modo, respecto a la percepción social de las personas mayores, menos de un tercio de los encuestados considera que se valore de manera adecuada a este sector de la población.
"Una percepción preocupante. Más aún si se tiene en cuenta que la proporción de personas mayores de 80 años aumentará casi cuatro veces en los próximos 50 años. En este sentido, hay que cambiar la visión sobre el papel que desempeñan y las necesidades de los mayores tienen que ser reconocidas", ha zanjado el director global de Demencia de Bupa, Graham Stokes.