MADRID 21 Jun. (EUROPA PRESS) -
Una hidratación constante y el seguimiento de una alimentación saludable son algunas de las recomendaciones que ha ofrecido el geriatra del Hospital Universitario La Luz, Francisco Soria, para que las personas mayores puedan disfrutar de un verano "seguro y saludable", coincidiendo con el Día Mundial de la Ancianidad que se conmemora este viernes.
La exposición al sol aporta beneficios siempre que se realice de manera segura. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda una exposición de 10 a 15 minutos en cara y brazos, al menos tres veces por semana, y el uso de protector solar para tiempos prolongados. Según el experto, los mayores de 65 años son "especialmente vulnerables" al calor debido a alteraciones en su centro termorregulador y una menor sensación de sed, por lo que deben seguir una serie de recomendaciones.
En este sentido, Soria ha apuntado que las personas mayores deben beber "al menos" ocho vasos de agua al día para mantenerse bien hidratados ante el aumento de las temperaturas. Asimismo, deben evitar el consumo excesivo de bebidas con cafeína o alcohol, que pueden causar deshidratación.
Respecto a la alimentación, ha señalado que esta debe ser adecuada para el verano, equilibrada e incluir frutas y verduras frescas. Estos alimentos no solo proporcionan vitaminas y minerales esenciales, sino que también ayudan a mantener el cuerpo hidratado. Evitar comidas pesadas y optar por porciones más pequeñas y frecuentes para facilitar una digestión más rápida son otros de los consejos que ha facilitado el experto.
Soria ha sugerido también que se eviten las horas de mayor calor, generalmente situadas entre las 12 y las 16 horas, para prevenir golpes de calor. En su lugar, se pueden planificar actividades al aire libre en las primeras horas de la mañana o al atardecer, cuando las temperaturas son más bajas.
Asimismo, ha indicado el uso de ropa ligera, de colores claros y fabricada con materiales transpirables como el algodón, que ayuda a regular la temperatura corporal, así como utilizar sombreros o gorras y gafas de sol para protegerse de los rayos UV.
Por último, ha recordado la importancia de ventilar la casa a primera hora de la mañana o por la noche, con el objetivo de mantener ambientes frescos.