MADRID, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El deseo de la mayoría de los españoles es envejecer en casa puesto que, según el estudio 'Todos queremos envejecer en casa: ¿el mayor tiempo posible y con ayuda de la tecnología?', el 85 por ciento de la población querría envejecer en casa sin acudir a un hospital, para lo que es necesario el uso de las nuevas tecnologías que permitan hacer un seguimiento médico a distancia.
Cuando el bienestar de un familiar empeora, así como su independencia y autonomía, la protección y el cuidado de su salud se convierten en una prioridad. En este sentido, el 73 por ciento de los encuestados manifiestan que el cuidado total de una persona en situación de dependencia conlleva una serie de esfuerzos que pueden provocar dificultades para conciliar la vida laboral y familiar con esos cuidados.
En este sentido, conocer en todo momento el estado de la persona dependiente se convierte en algo rutinario. Por ello, a la mayoría de los entrevistados (84%) les generaría confianza que su familiar mayor o dependiente estuviera localizado en todo momento, tanto dentro como fuera de casa.
Esta encuesta se ha realizado para Novaltia en Aragón y País Vasco con el objetivo de conocer la percepción que tiene la población acerca del papel que puede tener la tecnología en los cuidados domiciliarios de mayores, enfermos crónicos y personas con discapacidad.
De los entrevistados en la encuesta, uno de cada dos tiene o ha tenido a su cargo a algún familiar mayor o dependiente, principalmente familiares de primer grado: madres (33%) y padres (19%). Esto produce que muchas personas se conviertan en cuidadores sin esperarlo, en ocasiones, por un tiempo indefinido.
Aquí, las nuevas herramientas tecnológicas, como los teléfonos móviles, tienen mucho que aportar; de hecho, al 61 por ciento de los entrevistados les interesaría tener una aplicación en su móvil para poder hacer el seguimiento de las mediciones de salud de su familiar mayor/dependiente.
Según muestra el informe, las aplicaciones relacionadas con temas de salud, usadas por el 49 por ciento de los usuarios -especialmente en Aragón- y por las personas que tienen algún familiar a su cargo, se posicionan en quinto lugar detrás de aquellas referidas a la banca, al clima, a las tiendas 'on line' y a la gestión del calendario, respectivamente.
En este sentido, la tecnología puede convertirse en un apoyo en los cuidados y puede facilitar la vigilancia, supervisión, control, o seguimiento de las personas dependientes. Los encuestados destacan dos ventajas esenciales que le supone el uso de dispositivos tecnológicos para el cuidado domiciliario y son que aporta una mayor tranquilidad de los familiares y cuidadores (76%) y una mayor seguridad (61%). Además, expresan otra serie de beneficios como una mejora de la comunicación y conseguir mayor rapidez o atención inmediata.
En el caso de personas dependientes/mayores, podría existir una pequeña barrera a la hora de manejar estos dispositivos y necesitarían cierto acompañamiento para su utilidad. Por este motivo, el estudio resalta también la labor que tienen los profesionales sanitarios y, en concreto, los farmacéuticos, para guiar y aconsejar a los cuidadores, familiares, mayores o personas dependientes, no solo en temas de salud, sino también en el uso de aplicaciones o dispositivos de cuidado en el hogar.
En este aspecto, el 60 por ciento de los encuestados afirman que tienen un farmacéutico de referencia al que siempre acuden pero, además, la gran mayoría confiaría en su farmacéutico de toda la vida para que hiciera el seguimiento de su salud o de la salud de un familiar y consideraría útil tener un registro de parámetros médicos medidos por el farmacéutico.