El uso de condroprotectores evitaría cerca de 20.000 efectos adversos anuales y un ahorro de 40 millones en tres años

Artrosis
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Publicado: miércoles, 5 febrero 2020 13:23

MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

El uso de condroitín sulfato y glucosamina (Sysadoas, por sus siglas en inglés) evitaría al Sistema Nacional de Salud (SNS) cerca de 20.000 efectos adversos anuales y un ahorro económico de más de 40 millones de euros en tres años, según el 'Informe de Impacto presupuestario y sanitario', realizado por la Consultora Health Value y presentado por la compañía Reig Jofre.

"Los datos analizados sugieren que el tratamiento con Sysadoa (condroitín) de los pacientes españoles con artrosis de rodilla, evitaría en un periodo de tres años cerca de 20.000 efectos adversos anuales de diferente índole y millones de euros de ahorro para el SNS. Ante esta realidad, se debe hacer una seria reflexión y valorar los beneficios de este grupo de fármacos de forma global", ha comentado el director de la Consultora Health Value y experto en Farmacoeconomía, Carlos Rubio.

Se trata de un grupo de fármacos de acción lenta aprobados por la Agencia Española del Medicamento para el tratamiento de la artrosis, enfermedad reumática más frecuente en España, que sufren cerca de siete millones de españoles y que se convertirá, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la cuarta causa de discapacidad en el mundo en el 2020, según la OMS.

Ambas sustancias son dos moléculas complejas, polisacáridos, que forman parte de diversas estructuras de la articulación, fundamentalmente el cartílago. En los años 70-80 se empezaron a hacer estudios 'in vitro' en los que se incluían estas sustancias a muestras de cartílago artrósico y observaron una mejoría en los datos del metabolismo del cartílago. Posteriormente se realizaron ensayos clínicos en pacientes con artrosis, comparando con AINES (antiinflamatorios), estudiando el efecto sintomático del condroitín sulfato y de la glucosamina.

En la década de los 90 aparecen evidencias científicas que apoyan el efecto terapéutico de los Sysadoas sobre el dolor en los pacientes con artrosis de una forma muy parecida a los AINES, con una significativa menor incidencia de efectos secundarios, ya sea a nivel digestivo, cardiovascular, hepático y/o renal. Además, se observó que después de un periodo de tratamiento de 3 meses la mejoría sintomática duraba al menos dos meses más, a diferencia de otros analgésicos habituales (paracetamol, AINES).

FÁRMACOS "DE GRAN UTILIDAD TERAPÉUTICA"

Además, sobre el efecto sintomático del dolor producido en la artrosis, el condroitín sulfato y glucosamina existen evidencias científicas de que producen un retraso en la evolución de la artrosis y el deterioro del cartílago. De hecho, en países como España, Portugal, Francia, Austria o Finlandia, estos compuestos están regulados por las autoridades sanitarias como fármacos, con todo lo que ello conlleva, como control de calidad en la producción, concentraciones adecuadas o trazabilidad.

"Los condroprotectores son un grupo de fármacos de acción lenta aprobados por la Agencia Española del Medicamento para el tratamiento de la artrosis. Es importante subrayar que no son nutracéuticos sino fármacos de gran utilidad terapéutica con mínimos efectos secundarios, que permiten reducir el dolor y mejorar la capacidad funcional. Son fármacos seguros y tienen evidencias científicas de que producen un retraso en la evolución de la artrosis y el deterioro del cartílago", ha dicho el especialista en Reumatología del Hospital Universitario La Paz de Madrid, Miguel Bernad.

En concreto, el uso de condroitín sulfato evitaría en el próximo trienio unos 55.098 episodios gastrointestinales leves o moderados (con un coste de 240 euros por episodio); 3.060 episodios gastrointestinales graves (con un coste de 2.857 euros por episodio); 204 cardiopatías isquémicas (con un coste de 6.168 euros por cada caso); 1.089 casos de insuficiencia renal aguda (con un coste de 6.011 euros por caso); y 733 casos de insuficiencia renal crónica (con un coste de 10.221 euros por caso).

En consecuencia, según el informe, el ahorro económico que se produciría por el uso de condroitín sulfato en los próximos tres años ascendería (sumando el coste de todos los efectos adversos) a 40.944.798 euros.