Un tratamiento preventivo inyectable reduce las complicaciones de la retinopatía diabética

Archivo - Retinopatía diabetica.
Archivo - Retinopatía diabetica. - 'HPITAL MAISONNEUVE-ROSEMONT - Archivo
Publicado: miércoles, 31 marzo 2021 7:26

MADRID, 31 Mar. (EUROPA PRSS) -

El tratamiento precoz con inyecciones de con anti-factor de crecimiento endotelial vascular (anti-VEGF) frenó la retinopatía diabética en un estudio clínico de La Red de Investigación Clínica de la Retinopatía Diabética DRCR. Sin embargo, a los dos años del estudio, de cuatro años de duración, su efecto sobre la visión era similar al del tratamiento estándar, que suele iniciarse al comienzo de la enfermedad tardía.

Estos resultados intermedios del estudio, que cuenta con el apoyo del Instituto Nacional del Ojo (NEI por sus siglas en inglés), que forma parte de los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos, se publican en la revista 'JAMA Ophthalmology'.

"Aunque es posible que las inyecciones preventivas de fármacos anti-VEGF ayuden a proteger la visión a largo plazo, no vimos ningún efecto sobre la visión a los dos años --añade el doctor Raj Maturi, de la Universidad de Indiana, presidente del protocolo del estudio--. Estos resultados a los dos años sugieren que la vigilancia estrecha y el tratamiento rutinario cuando se desarrollan complicaciones son clave para prevenir la pérdida de visión por retinopatía diabética".

Se calcula que 30 millones de estadounidenses padecen diabetes, que puede causar anomalías en los vasos sanguíneos, incluido el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos en el ojo, lo que se denomina retinopatía diabética.

En las primeras fases de la retinopatía diabética, llamada retinopatía diabética no proliferativa (NPDR), los cambios en los vasos sanguíneos del ojo son visibles para los médicos, pero generalmente no afectan a la vista.

En las fases avanzadas, las personas pueden desarrollar una retinopatía diabética proliferativa (RDP), en la que los vasos sanguíneos de la retina crecen de forma anormal, y/o un edema macular diabético (EMD), en el que el líquido sale de los vasos sanguíneos de la retina. Ambos pueden provocar pérdida de visión y ceguera.

El tratamiento, por ejemplo con fármacos anti-VEGF, puede ralentizar o prevenir la pérdida de visión en personas con RDP o EMD, siempre que el tratamiento se realice con prontitud.

En este estudio, los participantes con RDP fueron asignados aleatoriamente al inicio del estudio para recibir inyecciones de 'Eylea' (aflibercept) o una inyección simulada. Se les examinó al mes, a los dos y a los cuatro meses, y luego cada cuatro meses durante dos años, recibiendo 'Eylea' o una inyección simulada en cada visita.

Los investigadores hicieron un seguimiento de su agudeza visual y de la gravedad de su retinopatía diabética. Si la enfermedad progresaba, independientemente de si estaban en el grupo de tratamiento o en el de simulación, los participantes recibían 'Eylea' con más frecuencia, como se hace en la práctica habitual. Si su estado no mejoraba con el tratamiento anti-VEGF adicional, los participantes podían recibir tratamientos como la fotocoagulación con láser o la cirugía, si era necesario.

En el estudio participaron 328 personas (399 ojos). En dos años, la tasa de desarrollo de RDP fue del 33% en el grupo de control, frente al 14% en el grupo de tratamiento. Asimismo, la tasa de desarrollo de EMD que afecta a la visión fue del 15% en el grupo de control, frente al 4% en el grupo de tratamiento.

Sin embargo, la pérdida de agudeza visual fue esencialmente la misma entre los dos grupos a los 2 años, lo que sugiere que el tratamiento estándar en el momento de la aparición de la RDP o del EMD que afecta a la visión es suficiente para prevenir una mayor pérdida de visión en este momento.

"Tenemos un tratamiento realmente bueno para estas enfermedades, por lo que podemos controlar las complicaciones de la visión que pueden surgir a medida que la enfermedad progresa para muchos ojos --señala Adam Glassman, del Centro Jaeb para la Investigación en Salud, director del centro de coordinación DRCR.net--. Cuando se evalúan nuevas estrategias de tratamiento preventivo, es importante compararlas directamente con el tratamiento estándar después de que la enfermedad empeore, como hemos hecho en este estudio".

"Aunque no observamos ninguna diferencia en los resultados visuales a los dos años, el seguimiento a los cuatro años va a ser muy importante --añade la doctora Jennifer Sun, del Centro de Diabetes Joslin, de la Facultad de Medicina de Harvard, presidenta de Iniciativas de Diabetes de la Red--. Miramos hacia los datos de los cuatro años para ver si la reducción de las tasas de empeoramiento de la retinopatía diabética conducirá a una mejora a largo plazo de los resultados visuales".