MADRID, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los resultados de un estudio preclínico han aportado nueva evidencia científica de que un suplemento dietético multimineral conocido como 'Aquamin' podría ser una forma sencilla y eficaz de reducir las consecuencias a largo plazo para la salud de la enfermedad del hígado graso no alcohólico.
Derivado de algas marinas rojas calcificadas, este suplemento mineral es rico en calcio, magnesio y otros 72 minerales y oligoelementos, según explican los responsables de esta investigación en la presentación del artículo, que tendrá lugar en la reunión anual de la Sociedad Americana de Patología Investigativa durante el encuentro de Biología Experimental 2022, que se celebrará del 2 al 5 de abril en Philadelphia (Estados Unidos).
Algunas personas con esta enfermedad desarrollan una forma más agresiva conocida como esteatohepatitis no alcohólica (EHNA) en la que el hígado se inflama. Esta enfermedad puede evolucionar hacia la fibrosis, la cicatrización avanzada conocida como cirrosis, la insuficiencia hepática y el cáncer.
"La enfermedad del hígado graso no alcohólico es un problema de salud pública cada vez mayor que actualmente se aborda haciendo hincapié en los cambios de estilo de vida, sobre todo en la dieta, para evitar la acumulación de grasa en el hígado. Se necesitan nuevos enfoques porque esto no funciona para todos", afirma el director del equipo de investigación, el doctor Muhammad Nadeem Aslam, de la Universidad de Michigan en Ann Arbor.
La mayoría de las personas que viven en la sociedad occidental no cumplen con las directrices de ingesta diaria para la ingesta de calcio y magnesio y, presumiblemente, otros minerales asociados nutricionalmente con estos minerales. "Estamos trabajando para averiguar si un suplemento mineral podría proporcionar un enfoque de bajo coste y baja o nula toxicidad para mitigar las devastadoras consecuencias de la enfermedad del hígado graso no alcohólico", detallan.
En los estudios preliminares, los investigadores alimentaron a ratones con una dieta rica en grasas para inducir el desarrollo de la enfermedad del hígado graso no alcohólico y la EHNA. Estudiaron estos ratones durante 15 a 18 meses para observar todo el espectro de la enfermedad hepática, incluidos los cambios fibróticos avanzados y el cáncer de hígado.
Estos estudios revelaron una reducción drástica de las consecuencias de la EHNA en las últimas fases de la enfermedad en los animales alimentados con la dieta alta en grasas y que recibieron el suplemento multimineral, en comparación con los que no recibieron el suplemento.
En los estudios a corto plazo, que duraron unas 24 semanas, los investigadores identificaron cambios en las proteínas asociados a la EHNA y redujeron la formación de tumores en los estudios más largos.
"En los estudios a largo plazo, observamos que la mayoría de los ratones con la dieta alta en grasas tenían grandes tumores en el hígado, mientras que los ratones con la misma dieta no tenían tumores cuando recibían el suplemento mineral. Estos resultados confirmaron nuestras conclusiones anteriores de que los minerales pueden tener el potencial de reducir las consecuencias posteriores de la enfermedad del hígado graso", apuntan los autores.
Dado que los estudios a corto y largo plazo se realizaron con distintos tipos de ratones, los investigadores tienen previsto realizar ambos conjuntos de estudios en los mismos animales. Esto les permitirá identificar los primeros cambios en las proteínas de cada animal que puedan predecir las consecuencias posteriores o estar asociados a la protección contra dichas consecuencias.
Recientemente han completado un ensayo en fase piloto de 90 días en 30 pacientes sanos con riesgo de padecer cáncer colorrectal a los que se les asignó aleatoriamente recibir 'Aquamin' o un placebo. El ensayo demostró que el suplemento mineral no planteaba ningún problema de seguridad o tolerabilidad, incluido cualquier posible daño hepático.
Además, están empezando a realizar estudios clínicos piloto para evaluar la seguridad y tolerabilidad de 'Aquamin' durante 180 días. Las lesiones hepáticas y los marcadores de inflamación formarán parte de los criterios de valoración del estudio.