MADRID, 3 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los medicamentos que contienen un tipo de PFAS o "sustancia química permanente" llamada flúor no están provocando un mayor número de reacciones adversas a medicamentos según un nuevo análisis de datos de la Universidad de Birmingham (Reino Unido).
En un nuevo artículo publicado en 'PLOS ONE' los investigadores describen cómo estudiaron datos del sistema Yellow Card de la MHRA sobre 13 medicamentos que contenían enlaces carbono-flúor, así como seis medicamentos que eran estructuralmente similares pero que no contenían esta sustancia química permanente.
Utilizando datos de cinco años (2019-2024), el equipo de investigación analizó el número de reacciones adversas a medicamentos (RAM) por cada millón de medicamentos dispensados. Descubrieron que la mayoría de las RAM registradas para medicamentos con flúor se asociaban con afecciones que no se relacionaban con los efectos secundarios habituales de los PFAS, y el fármaco más recetado, el lansoprazol, un inhibidor de la bomba de protones para reducir la acidez estomacal, presentó una baja tasa de 14,1 RAM por cada millón de medicamentos.
El doctor Alan Jones, de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Birmingham y autor correspondiente del artículo, declara: "Las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) suelen denominarse sustancias químicas permanentes" debido a su persistencia en el medio ambiente y sus efectos sobre la salud humana.
Las PFAS se encuentran en diversos productos de uso diario, como utensilios de cocina o ropa. Los cambios recientes en la clasificación de las PFAS implican que ciertos medicamentos esenciales ahora se consideran sustancias químicas permanentes.
En este estudio, analizaron las reacciones adversas a medicamentos notificadas al sistema de Tarjeta Amarilla de la MHRA en relación con su tasa de prescripción. Resulta tranquilizador que no se observara ninguna correlación estadística entre el contenido de flúor del medicamento y el tipo de efecto secundario.
Entre los 13 fármacos seleccionados para el estudio, el equipo no observó ninguna relación entre la cantidad de átomos de flúor en el medicamento y el número de reacciones adversas notificadas. Entre los fármacos con mayor concentración de flúor, la sitagliptina y la flecainida no presentaron los niveles más altos de reacciones.
El equipo también analizó tipos específicos de RAM en los 13 fármacos fluorados estudiados y descubrió que, si bien las reacciones se asociaron con efectos secundarios similares a los de los PFAS, la comparación con fármacos no fluorados sugiere que era más probable que la forma en que actuaba el fármaco provocara esa RAM.
Los investigadores señalan que las limitaciones del estudio incluyen la naturaleza autoinformada del sistema de Tarjeta Amarilla, lo que podría llevar a un subregistro de reacciones adversas a medicamentos.