SANTA CRUZ DE TENERIFE, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Servicio Canario de la Salud junto con el de Extremadura pilotaron en 2015 la puesta en marcha de la receta electrónica interoperable del Sistema Nacional de Salud, proyecto coordinado por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, que permite a los pacientes retirar sus medicamentos en cualquier oficina de farmacia de otra Comunidad Autónoma distinta a la de su residencia.
De este modo, Canarias y Extremadura se convirtieron en las primeras autonomías en facilitar a los pacientes la posibilidad de retirar su medicación en las oficinas de farmacia de ambas regiones.
El Ministerio ha autorizado recientemente el acceso al proyecto de interoperabilidad de receta electrónica en el Sistema Nacional de Salud (SNS) a tres nuevas CCAA: Asturias, Murcia y País Vasco, que se suman a las de Canarias, Extremadura, Aragón, Castilla La Mancha, Castilla-León, Comunidad Valenciana, Galicia, La Rioja, y Navarra.
De esta manera ya son 12 las regiones españolas en las que el paciente puede obtener su medicación a través de receta electrónica interoperable, informa la Consejería en una nota.
La implantación del proyecto contó con la colaboración de los Colegios Oficiales de Farmacia de Las Palmas y Santa Cruz de Tenerife, que realizaron las adaptaciones necesarias para permitir la dispensación de medicamentos a pacientes de otras Comunidades Autónomas, que estén certificadas en el proyecto de Receta Electrónica del SNS en cualquier oficina de farmacia de Canarias.
Desde el año 2015 hasta diciembre de 2017, se han beneficiado 2.400 pacientes procedentes de otras Comunidades Autónomas, dispensándose en las oficinas de farmacia de Canarias un total de 9.229 recetas electrónicas interoperables.
La principal ventaja que se encuentra el usuario de la receta electrónica interoperable es la garantía de recoger todos los medicamentos, que tienen prescritos por medios electrónicos en cualquier oficina de farmacia, independientemente de la Comunidad Autónoma donde se hayan prescrito.
La Receta Electrónica Interoperable mejora la calidad asistencial al ciudadano, compartiendo la información sobre la prescripción y la dispensación de medicamentos entre los profesionales de las diferentes Comunidades.