MADRID 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
Científicos australianos han encontrado una cura potencial para el virus de la hepatitis B (VHB) con un nuevo tratamiento prometedor que ha mostrado un cien por cien de éxito en la eliminación de la infección en modelos preclínicos. Los pacientes australianos son ahora los primeros en el mundo en tener acceso al potencial tratamiento, una combinación de un fármaco antiviral y un fármaco contra el cáncer, que está en fases iniciales de ensayos clínicos en Melbourne, Perth y Adelaida.
Científicos del Instituto Walter y Eliza Hall, de Melbourne, desarrollaron el tratamiento combinado usando birinapant, un medicamento desarrollado por la empresa estadounidense de biotecnología TetraLogic Pharmaceuticals para el tratamiento de cáncer. La hepatitis B es una enfermedad viral crónica que es actualmente incurable.
Los doctores Marc Pellegrini, Greg Ebert y sus colegas del Instituto usaron sus estudios sobre el comportamiento de los virus de la hepatitis B en las células infectadas como base para el tratamiento, como se describe en dos artículos sobre la investigación que se publican este lunes en 'Proceedings of the Natinoal Academy of Sciences'.
El doctor Pellegrini señala que el tratamiento tuvo éxito en la curación de las infecciones en los modelos preclínicos, lo que llevó a un ensayo humano que comenzó en diciembre de 2014. "Tuvimos un éxito del cien por cien en la curación de la infección por VHB en cientos de pruebas en modelos preclínicos", apunta el doctor Pellegrini.
"Birinapant permitió la destrucción de las células del hígado infectadas con la hepatitis B dejando a las células normales sanas y salvas. Cuando se administró birinapant en combinación con el medicamento actual antiviral entecavir, la infección fue eliminada dos veces más rápido en comparación con birinapant solo. Tenemos la esperanza de que estos prometedores resultados sean igual de exitosos en los ensayos clínicos en humanos que actualmente están llevando a cabo en Melbourne, Perth y Adelaida", augura.
El tratamiento de combinación, desarrollada en colaboración con TetraLogic Pharmaceuticals con sede en Malvern, Pennsylvania, Estados Unidos, se dirige a la vías de señalización celular que el virus de la hepatitis B utiliza para mantener vivas las células del hígado del huésped. Enfermedades infecciosas crónicas como VHB viven dentro de las células del huésped, lo que les permite persistir en el cuerpo durante muchos meses o años, señala Pellegrini.
"Normalmente, las células hepáticas responderían a la infección mediante el cambio en una señal que indica a la célula que se destruya a sí misma 'por el bien común', para prevenir una mayor infección -explica--. Sin embargo, nuestra investigación demostró que el virus se apodera de 'comunicaciones internas', diciendo a las células que ignoren la infección y se mantengan con vida. Birinapant da la vuelta al interruptor de supervivencia de las células usado por el virus, llevando a las células infectadas a morir".
Pellegrini y sus colegas ahora investigan si se puede aplicar la misma estrategia a otras enfermedades infecciosas crónicas. "Los patógenos que infectan y residen dentro de las células huésped, incluyendo enfermedades virales como el VIH, el herpes simple y la fiebre del dengue, e infecciones bacterianas como la tuberculosis, podrían potencialmente ser curados de una manera similar", adelanta.