MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -
Grupo Peaches Biotech, compañía española especializada en medicina regenerativa y terapias avanzadas, ha publicado resultados positivos 'in vivo' de su medicamento PRS CK STORM contra la tormenta de citoquinas asociada a procesos infecciosos, entre ellos el COVID-19.
La compañía está desarrollando una serie de fármacos biológicos obtenidos por cultivo de diferentes células tisulares primarias y también estromales mesenquimales (MSCs) con macrófagos M2, para producir efectos antiinflamatorios y antifibróticos, actuando sobre la expresión de citoquinas proinflamatorias del sistema inmune innato.
Uno de estos productos es el PRS CK STORM, basado en una patente desarrollada por Peaches Biotech, procedente del co-cultivo entre macrófagos M2 (monocitos polarizados a M2) y células mesenquimales, cuya seguridad y eficacia se ha ensayado en este estudio con animales. La revista 'Biomedicines' del grupo especializado en publicaciones científicas MPDI, publica este estudio realizado en un modelo generado con un lipopolisacárido bacteriano (LPS) como agente causante del daño pulmonar agudo que provoca la tormenta de citoquinas en ratones, muestra la gran eficacia y seguridad que tiene este producto para combatir la reacción autoinmune provocada por la tormenta de citoquinas.
El análisis histopatológico de los diversos órganos de los ratones, incluyendo los pulmones, dañados tras la administración del LPS, mostró cómo el daño se revertía, hasta el punto de la desaparición del mismo, en los ratones tratados con PRS CK STORM en la dosis más alta de las tres utilizadas en el ensayo. Estos resultados fueron claramente superiores a los observados en los ratones tratados con anakinra (uno de los tratamientos actuales en este tipo de patologías).
En conjunto, los resultados muestran que el PRS CK STORM, compuesto por un secretoma del co-cultivo de macrófagos M2 con MSCs, en las dosis elegidas para el estudio, ha demostrado una gran capacidad para reducir la inflamación aguda en las tormentas de citoquinas, asociadas a infecciones severas, como la del COVID-19.
Además, ha demostrado su eficacia como fármaco antifibrótico, evitando las consecuencias negativas a medio y largo plazo de los fenómenos inflamatorios agudos, mediante la inmunorregulación de la actividad del sistema inmune innato y la mejora de su coordinación con la inmunidad adaptativa.
"Comprender cómo se comunican e interrelacionan los macrófagos con las células estromales mesenquimales es un gran avance que nos permitirá acelerar soluciones clínicas para tratar procesos inflamatorios, causados por una reacción inmunitaria exacerbada, que provoca una tormenta de citoquinas en respuesta a infecciones. Hemos observado una recuperación del tejido pulmonar dañado que nos ha sorprendido y nos da un gran optimismo para su utilización clínica en pacientes", señala Pedro Lapuente, director científico de Peaches Biotech y principal autor de la publicación.