MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha reclamado aumentar el uso de medicamentos biosimilares, tras comprobar que es posible ahorrar hasta 9.000 euros por tratamiento, por ejemplo, para tratar el cáncer de mama con bevacizumab.
Los medicamentos biológicos son fármacos especialmente sofisticados elaborados a base de sustratos vivos (células, virus, bacterias, etc.) que suelen reservarse para la dispensación o el uso hospitalario. No obstante, según se acerca el final de sus patentes, empiezan a surgir sus equivalentes 'genéricos', con la misma eficacia y seguridad, y normalmente más baratos, los biosimilares.
En la Unión Europea, hay ya 77 medicamentos biosimilares autorizados, 46 de los cuales se comercializan en España. Sin embargo, su uso es muy desigual dependiendo de la comunidad autónoma, según denuncia la OCU a través de un comunicado.
De acuerdo con los últimos datos disponibles, de 2019, el empleo de biosimilares frente a fármacos biológicos originales apenas sumó el 5 por ciento del País Vasco. Otras comunidades autónomas con un bajo porcentaje de sustitución eran La Rioja (16%) y Canarias (21%). Por el contrario, en Andalucía y Asturias, superaban el 40 por ciento; mientras que en Castilla-La Mancha alcanzaba el 47 por ciento.
Por ello, OCU ha pedido a las Consejerías de Sanidad de las Comunidades Autónomas que se prioricen, "siempre que sea posible", los medicamentos biosimilares frente a los biológicos originales, "por lo general más caros".
"Por ejemplo, a través de programas de ganancias compartidas, como el recientemente firmado por la Junta de Extremadura con el fin de que los ahorros reviertan en los propios servicios de salud que los generan, en sus profesionales y pacientes. La ganancia es clara, no solo por el espectacular ahorro en medicamentos que puede conseguirse, también porque permite un acceso más temprano de los pacientes a estos tratamientos tan caros", han resaltado desde la OCU.
Un estudio de la Asociación Española de Medicamentos Biosimilares estimaba el ahorro que supone este tipo de fármacos: de 5.162 millones de euros entre 2009 y 2022. "Un ahorro enorme si consideramos que el gasto farmacéutico anual suma 20.996 millones de euros", concluye la OCU.