MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
En uno de los estudios más grandes de su tipo, investigadores utilizaron la tecnología CRISPR para alterar cada gen en más de 300 modelos de 30 tipos de cáncer y descubrir miles de genes clave esenciales para la supervivencia del cáncer. El equipo, del 'Wellcome Sanger Institute', en Reino Unido, y Open Targets, desarrolló un nuevo sistema para priorizar y clasificar los 600 objetivos de medicamentos que son los más prometedores para el desarrollo de tratamientos.
Los resultados, publicados este miércoles en 'Nature', aceleran el desarrollo de tratamientos dirigidos contra el cáncer y acercan a los investigadores a la creación del mapa de dependencia del cáncer, un reglamento detallado de los tratamientos de precisión contra el cáncer para ayudar a que más pacientes reciban terapias efectivas.
Cada dos minutos, alguien en Reino Unido recibe un diagnóstico de cáncer y una de cada dos personas desarrollará cáncer en algún momento de sus vidas. La cirugía, la quimioterapia y la radioterapia se usan comúnmente para tratar el cáncer; sin embargo, aunque pueden ser eficaces para matar las células cancerosas, algunos pacientes no responden al tratamiento y el tejido sano puede dañarse, lo que provoca efectos secundarios tóxicos no deseados para los pacientes.
Los científicos y las compañías farmacéuticas están explorando nuevas terapias dirigidas que matan selectivamente las células cancerosas, dejando el tejido sano ileso. Actualmente, producir nuevos tratamientos efectivos es muy difícil; cuesta aproximadamente entre 1.000 y 2.000 millones desarrollar un solo medicamento, pero alrededor del 90 por ciento de los medicamentos fallan durante el desarrollo. Por lo tanto, la selección de un buen objetivo farmacológico al comienzo del proceso puede verse como la parte más importante del descubrimiento de medicamentos.
Investigadores del Instituto Wellcome Sanger, GSK, Instituto Europeo de Bioinformática (EMBL-EBI), Open Targets y sus colaboradores han llevado a cabo una de las pantallas CRISPR más grandes de genes de cáncer hasta la fecha, interrumpiendo casi 20.000 genes en más de 300 modelos de cáncer de 30 tipos de cáncer para descubrir qué genes son críticos para la supervivencia del cáncer.
CIENCIA A NIVEL MUNDIAL Y DE GRAN PRECISIÓN
El equipo se centró en los cánceres comunes, como el pulmón, el colon y la mama, y ??los cánceres de necesidad clínica insatisfecha, como el pulmón, el ovario y el páncreas, donde se necesitan urgentemente nuevos tratamientos. Los científicos identificaron varios miles de genes de cáncer clave y desarrollaron un sistema de priorización para reducir la lista a aproximadamente 600 genes que mostraron la mayor promesa para el desarrollo de fármacos.
Un objetivo con puntaje máximo presente en múltiples tipos de cánceres fue helicasa RecQ en síndrome de Werner (WRN, por sus siglas en inglés). El equipo encontró que las células cancerosas con una vía de reparación de ADN defectuosa, conocidas como cánceres inestables de microsatélites, requieren WRN para sobrevivir. La inestabilidad de microsatélites ocurre en muchos tipos diferentes de cáncer, incluido el 15 por ciento de los cánceres de colon y el 28 por ciento de los estomacales. La nueva identificación de WRN como un objetivo prometedor de medicamentos ofrece una oportunidad emocionante para desarrollar los primeros tratamientos contra el cáncer dirigidos a WRN.
El doctor Kosuke Yusa, coautor del Instituto Wellcome Sanger y Open Targets, ahora con sede en el Instituto de Vida Fronteriza y Ciencias Médicas de la Universidad de Kyoto, en Japón, señala: "CRISPR es una herramienta increíblemente poderosa que nos permite hacer ciencia a nivel mundial y con una precisión que no podíamos hacer hace cinco años. Con CRISPR hemos descubierto una oportunidad muy emocionante para desarrollar nuevos medicamentos contra el cáncer".
"Para que un nuevo medicamento tenga la mejor oportunidad de triunfar en las fases finales de los ensayos clínicos, es crucial seleccionar el mejor medicamento y más prometedor al inicio del proceso de desarrollo de fármacos. Por primera vez, de forma orientada a los datos, proporcionamos orientación a escala del genoma sobre la cual se deben presentar nuevos objetivos terapéuticos para el desarrollo de nuevos fármacos contra el cáncer", dice el doctor Francesco Iorio, co-primer autor del Instituto Wellcome Sanger y Open Targets.
La colaboración entre los investigadores de Sanger, EMBL-EBI y GSK, los socios de Open Targets, refuerza la traducción de estos resultados de investigación en nuevos tratamientos. Los conjuntos de datos producidos en este nuevo estudio sientan las bases para producir el Mapa de Dependencia del Cáncer, un reglamento detallado para el tratamiento con precisión del cáncer.
El doctor Mathew Garnett, coautor del Instituto Wellcome Sanger y Open Targets, apunta: "El Mapa de la Dependencia del Cáncer es un gran esfuerzo por identificar todas las debilidades que existen en los diferentes tipos de cáncer, por lo que podemos utilizar esta información para potenciar a la próxima generación de tratamientos de precisión para el cáncer".
"En última instancia, esperamos que esto tenga un impacto en la forma en que tratamos a los pacientes, por lo que muchos más pacientes recibirán terapias efectivas. Mientras tanto, esta herramienta estará disponible de manera gratuita para los científicos de todo el mundo para comprender qué hace que un cáncer sea un cáncer y cómo podríamos atacar diferentes tipos de cáncer mucho más eficazmente que lo que hacemos hoy en día", añade.
La profesora Karen Vousden, científica jefe de Cancer Research UK, recuerda que el estudio de las células en el laboratorio no siempre refleja las complejidades del cáncer en el cuerpo humano y, por lo tanto, no refleja necesariamente cómo responderá una persona a un medicamento. "Este trabajo proporciona algunos puntos de partida excelentes y los próximos pasos serán un análisis exhaustivo de los genes que se han identificado como debilidades en este estudio, para determinar si algún día conducirán al desarrollo de nuevos tratamientos para los pacientes", concluye.