MADRID, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Centro Médico Beth Israel Deaconess, en Bostón (Estados Unidos), han creado un medicamento antiinflamatorio para suprimir la reproducción de tumores que se produce después de someterse a la quimioterapia, este método se ha probado en ratones modificados con cáncer de ovario.
El estudio, publicado en 'Proceedings of the National Academy of Science', ha seguido una investigación previa en la que se demostraba que las células cancerosas muertas erradicadas gracias a los tratamientos convencionales para el cáncer desencadenaban, paradójicamente, una inflamación que promueve el crecimiento tumoral y la metástasis.
Trabajando en ratones con un tipo de la enfermedad, el equipo confirmó que las células de cáncer de ovario muertas por quimioterapia inducen a las células inmunitarias circundantes, llamadas macrófagos, a liberar una oleada de sustancias químicas. Juntos, estos químicos conocidos como citoquinas y mediadores de lípidos, crean un entorno propicio para el crecimiento y la supervivencia del tumor.
Al respecto, el director del proyecto, Allison Gartung, asegura que la terapia convencional contra el cáncer "es un arma de doble filo", ya que el mismo tratamiento para controlar la enfermedad "también la ayuda a sobrevivir y crecer". Para prevenir la recurrencia del tumor después de la quimoioterapia, "es fundamental neutralizar la actividad inherente de reproducción de tumores a partir de los desechos generados por la propia terapia", explica.
A continuación, el equipo demostró que el medicamento antiinflamatorio, llamado PTUPB y diseñado específicamente para atacar las vías químicas que conducen a las citoquinas y los mediadores de lípidos, bloquea la oleada de sustancias químicas que promueven tumores mediante macrófagos. Además, los científicos descubrieron que el PTUPB prolongaba la supervivencia en ratones con tumores ováricos y suprimía el crecimiento de tumores estimulados por residuos de las terapias convencionales.
El papel de estas citoquinas y lípidos inducidos por la quimioterapia "es poco apreciado y mal caracterizado", afirma el profesor y científico del centro, Dipak Panigrahy. Gracias a este nuevo descubrimiento, "los pacientes con cáncer de ovario pueden beneficiarse de la supresión de su liberación".