MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
La sospecha de que la vacuna COVID-19 de AstraZeneca está relacionada con un pequeño número de casos de trombosis venosa profunda (TVP), que han surgido recientemente en Europa entre los millones de personas que han sido vacunadas con ella, ha llevado a varios países a suspender las inyecciones con esta vacuna e investigar la relación causal con la TVP.
Los investigadores de Europa se unieron para explorar la hipótesis de que la suspensión de las vacunas de AstraZeneca, incluso durante un corto periodo de tiempo, podría causar muertes adicionales por la rápida propagación de COVID-19 dentro de una población de individuos susceptibles.
Los investigadores han comprobado en un nuevo estudio, mediante un modelo epidemiológico y análisis estadístico, que los beneficios de la vacuna COVID-19 de AstraZeneca superan sus riesgos y que pausar la vacunación con ella debido a presuntos vínculos con coágulos de sangre mortales podría permitir que el COVID-19 continúe propagándose y cause más muertes.
Los investigadores informan en la revista 'Chaos' que usaron un modelo epidemiológico de susceptibles-expuestos-infectados-recuperados (SEIR) y un análisis estadístico de los datos disponibles públicamente para estimar el exceso de muertes resultante de la suspensión de las vacunaciones de AstraZeneca y de las potencialmente vinculadas a los eventos adversos a la TVP en Francia e Italia.
Llegaron a la conclusión de que los beneficios de la aplicación de la vacuna de AstraZeneca superan con creces sus riesgos asociados, y los beneficios relativos son más amplios en situaciones en las que el número de reproducciones es mayor.
El modelo SEIR fue capaz de predecir la magnitud y el calendario de la segunda oleada de la enfermedad en Francia e Italia. "A pesar de su simplicidad, el modelo es capaz de propagar las incertidumbres mediante la adición de interactividad como fuente de aleatoriedad dentro de los datos --afirma Davide Faranda, del Laboratoire des Sciences du Climat et de l'Environnement y del London Mathematical Laboratory--. Imita nuestra ignorancia de los parámetros exactos del modelo debido a las capacidades de ensayo y a la evolución de los protocolos políticos y médicos".
El análisis riesgo-beneficio se realiza mediante una metodología inspirada en las estimaciones de Fermi. El grupo compara el exceso de muertes debido a la restricción temporal del despliegue de la vacuna de AstraZeneca y el exceso de muertes debido a sus posibles efectos secundarios.
Dada la gran cantidad de incertidumbres sobre los posibles efectos secundarios de la vacuna, recurrieron a realizar cálculos en el peor de los casos para proporcionar un límite superior sólido al exceso de muertes relacionadas.
"Nuestro trabajo muestra que suspender las vacunas de AstraZeneca en Francia e Italia durante tres días sin sustituirla por otra vacuna provocó unas 260 y 130 muertes adicionales, respectivamente --añade Faranda--. La diferencia entre el número de muertes de ambos países se debe a sus diferentes situaciones epidemiológicas y, en particular, al mayor número de reproducción básica R0 medido en Italia con respecto a Francia el 15 de marzo de 2021".
El grupo analizó el caso de la reanudación de las vacunaciones a una tasa duplicada durante el mismo número de días que la interrupción de la vacunación.
"El exceso de muertes sigue estando en el mismo orden de magnitud que el observado al reanudar las vacunaciones al mismo ritmo que antes de la interrupción, pero reducido por un factor de dos --advierte Faranda--. Este es un resultado evidente de los efectos no lineales de la dinámica epidemiológica. Los que no se han vacunado pueden contaminar a otros individuos antes de que se reanude la vacunación".
Aunque varios países hayan reanudado o estén a punto de reanudar la vacunación de AstraZeneca, los investigadores muestran que el efecto de la interrupción es difícil de contrarrestar y requerirá duplicar el despliegue de vacunas. En los grandes países donde se han reanudado las vacunaciones de AstraZeneca, la confianza en las vacunas se ha reducido en un porcentaje no despreciable.
"El análisis presentado aquí se ha realizado con un modelo parsimonioso pero bien planteado y probado, y esperamos que nuestros resultados sean el punto de partida de investigaciones más detalladas, más avanzadas y más maduras, con modelos sofisticados y ejercicios de recopilación de datos", explica Faranda.
Una primera prueba de la validez de sus estimaciones es el informe de siete muertes por TVP por cada 18 millones de vacunaciones en el Reino Unido, un valor que coincide con el trabajo del grupo basado en los datos disponibles hace unas semanas y asumiendo una tasa de mortalidad estándar por TVP de las vacunas de AstraZeneca.