Archivo - Una sanitaria consulta una tablet durante el cambio de guardia de la unidad móvil durante un día de trabajo del Servicio de Urgencia Médica (SUMMA 112) en el estado de alarma decretado por el Gobierno por la pandemia del coronavirus, en Madrid ( - Jesús Hellín - Europa Press - Archivo
MADRID 26 Dic. (EUROPA PRESS) -
El mercado global de dispositivos médicos ha alcanzado en 2025 un valor total de 579.000 millones de euros (681.570 millones de dólares), según el reciente informe publicado por la consultora internacional Mordor Intelligence, que analiza la evolución y las dinámicas clave del sector a nivel mundial.
El estudio destaca la "solidez" de una industria que se encuentra en "plena transformación, impulsada por la digitalización, el desarrollo de tecnologías inteligentes y la necesidad creciente de soluciones eficaces para el diagnóstico, la terapia y la monitorización de pacientes".
El informe subraya que "el mercado ha evolucionado hacia dispositivos con una fuerte base tecnológica, incorporando algoritmos de inteligencia artificial, 'software' avanzado y sistemas de conectividad que permiten la transmisión y el procesamiento de datos en tiempo real".
Para Ruth Cuscó, directora gerente de ASHO, esta cifra pone de manifiesto un cambio estructural de enorme relevancia en la forma en que se concibe la tecnología sanitaria. "Que el mercado alcance los 681.570 millones de dólares este año demuestra que estamos ante una industria que avanza decididamente hacia la integración de datos, inteligencia y seguridad", afirma.
"Los dispositivos médicos se han convertido en aliados esenciales para mejorar la precisión, la rapidez y la calidad de la atención", explica Cuscó.
El estudio de Mordor Intelligence también refleja un viraje claro hacia modelos asistenciales descentralizados. "La salud ya no se concentra exclusivamente en el hospital. La tecnología permite acompañar al paciente en su vida diaria, ofreciendo información continua y favoreciendo intervenciones más tempranas", añade Cuscó.
En cuanto a la seguridad de estos dispositivos, Cuscó recuerda que "las exigencias actuales en materia de ciberseguridad han elevado la madurez de toda la industria. Un dispositivo médico debe ser eficaz, pero también seguro, trazable y capaz de integrarse sin riesgo en ecosistemas clínicos cada vez más complejos".