MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un estudio dirigido por la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota (Estados Unidos) ha observado como adultos con diabetes tipo 2 que tomaban metformina, un medicamento para la diabetes comúnmente recetado, sufrieron casos menos graves de COVID-19 que aquellos a quienes no se les recetó metformina.
Estos hallazgos, que han sido publicados en 'PLOS ONE', fueron parte de un estudio observacional que analizó expedientes médicos electrónicos y comparó a adultos que tomaban metformina, una sulfonilurea o un inhibidor de la DPP-4.
"Este estudio sigue proporcionando justificación para realizar más investigaciones sobre la metformina para la COVID-19. Somos afortunados de contar con expertos en bioestadística e informática en nuestro Instituto de Ciencias Clínicas y Traslacionales que son excepcionales en los análisis observacionales", ha señalado Carolyn Bramante, asistente profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de Minnesota e internista y pediatra de M Health Fairview.
El estudio ha encontrado que entre los adultos con diabetes tipo 2 que tomaban un medicamento oral para su afección, los que tomaban metformina tenían un 45 por ciento menos de riesgo de necesitar un respirador o de morir por COVID-19 que las personas similares que no tomaban metformina.
De los análisis similares que se han realizado, este estudio utilizó una base de datos lo suficientemente grande como para permitir un estudio riguroso de la utilización y el efecto de estos medicamentos en una población más grande y bien definida. El equipo de investigación colaboró con expertos nacionales en farmacoepidemiología.
Estos hallazgos se suman al creciente cuerpo de datos que sugiere que la metformina reduce la gravedad de la COVID-19. El doctor Bramante dirigió el ensayo COVID-OUT, que publicó hallazgos a principios de este año que mostraron que la metformina reduce las probabilidades de visitas al departamento de emergencias, hospitalizaciones o muerte debido a COVID-19.
Algunos de estos datos más recientes incluyen experimentos de probeta en los que la metformina detuvo la multiplicación del virus. Los investigadores dicen que la metformina es segura, económica y ampliamente disponible, por lo que se justifican más ensayos clínicos.